El lehendakari, Iñigo Urkullu (PNV), y el presidente de La Rioja, Pedro Sanz (PP), han certificado este jueves la apertura de una nueva etapa de "buena vecindad y convivencia" tras las "dificultades" y conflictos que, en materias como la sanidad o la normativa fiscal, han enfrentado a las instituciones de ambos territorios en los últimos años.

Urkullu y Sanz han celebrado en Ajuria Enea, la residencia oficial del lehendakari en Vitoria, el primer encuentro institucional al más alto nivel entre Euskadi y La Rioja, en el que se ha firmado un convenio que amplía la vigencia de un acuerdo ya existente para la colaboración de ambas administraciones en materia sanitaria.

Tanto el presidente del Gobierno vasco, como su homólogo riojano, han destacado la relevancia de esta reunión, en la que también han participado los consejeros de Salud de Euskadi, Jon Darpón, y La Rioja, José Ignacio Nieto.

Ambos representantes institucionales se han referido a las "dificultades" por las que han pasado las relaciones de Euskadi y La Rioja en los últimos años.

Uno de los motivos de disputa ha sido la normativa fiscal propia de los territorios vascos, un terreno en el que el Ejecutivo riojano recurrió los incentivos conocidos como 'vacaciones fiscales' —finalmente declarados ilegales por la UE— y presentó un recurso contra el refuerzo de la protección de las competencias vascas en materia fiscal y económica, el conocido 'blindaje' del Concierto económico.

Hace dos años, los gobiernos vascos y riojano protagonizaron una fuerte polémica por la decisión de las autoridades riojanas de dejar de prestar atención sanitaria no urgente a ciudadanos vascos de poblaciones limítrofes con dicha comunidad. La situación se resolvió con un convenio que ahora se amplía con el acuerdo suscrito por ambas administraciones.

"problema enquistado"

Urkullu ha afirmado que con este acuerdo, así como con los compromisos de reforzar la colaboración en agricultura, investigación y desarrollo, y turismo, los gobiernos de ambas comunidades "tienden un puente" para mejorar sus relaciones.

"Es un primer paso, un acuerdo de buena vecindad para dar respuesta a una necesidad muy sentida por los pacientes y para resolver un problema enquistado", ha añadido.

Urkullu ha afirmado que este jueves se inicia "una nueva etapa" que "mira al futuro, con el deseo de que en las relaciones prime la colaboración y de que la confrontación quede en el pasado".

En la misma línea, Sanz ha calificado de "momento histórico" esta primera cita al más alto nivel entre los dos ejecutivos. "Son muchos años dándonos la espalda, y hoy nos damos la mano y nos miramos a los ojos", ha manifestado. El presidente de La Rioja ha subrayado que este "punto de inflexión" permitirá superar las "diferencias" que ambos territorios han mantenido en los últimos años, "desde el respeto a la singularidad e identidad" de cada comunidad autónoma.

En referencia a las especificidades competenciales de Euskadi, ha reconocido que el sistema foral del País Vasco debe "convivir" con el sistema "común" de la comunidad vecina. En el caso concreto de la normativa fiscal, ha reconocido que podrían producirse nuevos momentos de "dificultad", aunque ha defendido la fórmula del "diálogo".

Sanz, de todas formas, no ha rechazado que, de "agotarse" la vía del diálogo sin llegar a acuerdo alguno sobre posibles disputas, podría recurrirse a los tribunales de justicia, que están "para resolver" estas cuestiones.

CONVENIO

El convenio de colaboración en materia sanitaria suscrito por Nieto y Darpón responde al objetivo de garantizar "la accesibilidad y la equidad" en la asistencia a los ciudadanos de ambas comunidades.

Tradicionalmente, la asistencia sanitaria entre estas dos comunidades limítrofes se venía resolviendo a través de un acuerdo tácito, mediante el cual, desde La Rioja se atendía a los residentes en la Rioja Alavesa y, desde Euskadi, se atendía a pacientes de La Rioja derivados para determinadas técnicas y tratamientos.

A pesar de contar en la actualidad con un acuerdo firmado el 30 de marzo de 2012, con vigencia hasta el 31 de marzo de 2013, los responsables de ambas comunidades han decidido reforzarlo y ampliar su vigencia. Este acuerdo entrará en vigor a partir del día de su firma y tendrá una duración de tres años prorrogables por periodos anuales.

DERIVACIONES

Tal y como se recoge en este acuerdo, el Servicio Riojano de Salud prestará atención especializada a los pacientes que se deriven por los facultativos de atención primaria de Osakidetza-Servicio Vasco de Salud que residan en varios municipios de La Rioja Alavesa, que cuentan con una población de referencia de 11.500 personas. Hasta el pasado 31 de agosto, unas 3.500 personas residentes en estos municipios han recibido atención sanitaria en La Rioja.

Por su parte, Osakidetza prestará a los residentes en La Rioja servicios de alta especialización, como transplante renal infantil, cirugía infantil, cirugía de la obesidad, implantes cocleares o algunas técnicas de cirugía plástica, que La Rioja, "por capacidad demográfica y número de atenciones que precisa cada año", no puede poner en marcha. De estos servicios podrán beneficiarse alrededor de 500 pacientes riojanos.

Régimen económico

El acuerdo recoge los mecanismos económicos establecidos en el Sistema Nacional de Salud a través de la gestión del Fondo de cohesión sanitaria y del Fondo de garantía asistencial. No obstante, el "espíritu" del convenio es buscar el equilibrio asistencial y económico en ambas comunidades.

Además, en la reunión que han mantenido las delegaciones de ambos gobiernos se ha acordado constituir un grupo de trabajo conjunto que analizará los aspectos concretos en los que establecer la colaboración en materias como la investigación y el desarrollo, la agricultura y el turismo, a fin de formalizar un acuerdo que podría firmarse en la visita que realizará en noviembre el lehendakari a La Rioja.