Conejo (PSOE-A) subraya la fortaleza del nuevo Gobierno andaluz, que garantizará "un trato justo" a las ocho provincias

El secretario de Política Municipal del PSOE-A, Francisco Conejo, ha subrayado este miércoles la "fortaleza" del nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía, encabezado por Susana Díaz, y ha señalado que el Ejecutivo autonómico tendrá un marcado carácter municipalista y garantizará "un trato justo" a las ocho provincias andaluzas.

El secretario de Política Municipal del PSOE-A, Francisco Conejo, ha subrayado este miércoles la "fortaleza" del nuevo Gobierno de la Junta de Andalucía, encabezado por Susana Díaz, y ha señalado que el Ejecutivo autonómico tendrá un marcado carácter municipalista y garantizará "un trato justo" a las ocho provincias andaluzas.

Conejo, que ha visitado el municipio malagueño de Torrox, ha considerado que el nuevo Gobierno "dará respuesta a las necesidades de Andalucía en estos momentos de crisis económica", y ha explicado que sus prioridades serán "el empleo, el mantenimiento de los servicios públicos y de las políticas sociales y garantizar que la sanidad y la educación sean ejes fundamentales".

Según ha indicado a los periodistas, la acción de gobierno de los nuevos responsables autonómicos se basará en una política de proximidad, de modo que los consejeros "van a estar muy cerca del territorio, muy cerca de los problemas de la gente y dando la cara en estos momentos de dificultad".

Así, ha insistido en que se trata de un Ejecutivo "que va a gobernar para las ocho provincias, no es un gobierno que vaya a beneficiar a una provincia en detrimento de otra, sino que va a garantizar un trato justo a todas, teniendo en cuenta la idiosincrasia y la singularidad de cada una de ellas".

Conejo también se ha referido al reparto de consejerías, en el que la presidenta de la Junta "ha sido consciente de que tenía que equilibrar el Gobierno para que mirara por igual a la Andalucía occidental y a la oriental", al tiempo que ha subrayado el hecho de que el área económica esté en manos de un consejero malagueño, "lo que demuestra que reconoce la importancia que tiene Málaga como capital económica de Andalucía".

"Esta provincia es fundamental para el dinamismo de Andalucía y por eso es muy importante que el dinamismo económico que tiene Málaga se traslade al conjunto de Andalucía, que seamos capaces de que sirva como modelo del dinamismo que debe tener el conjunto de Andalucía", ha agregado.

Reforma local

Durante su intervención, Conejo también se ha referido a la propuesta de reforma de la Administración local que tiene en marcha el Gobierno de España, una reforma que, según ha considerado, "lo que pretende es el desmantelamiento de los servicios públicos que prestan las ciudades y los pueblos".

"Si el anteproyecto de ley se aprueba en los términos que el Gobierno ha remitido al Congreso de los Diputados, supondrá que la mayoría de los pueblos de Andalucía menores de 20.000 habitantes se quedarán prácticamente sin competencias para poder prestar los servicios a sus ciudadanos", ha augurado.

El dirigente socialista ha señalado que esta reforma, unida a otras como la de las demarcaciones judiciales, "que plantea la concentración de todos los juzgados en las capitales de provincia", conllevará "un alejamiento de los servicios públicos de los ciudadanos", así como que estos servicios sean "peores y más caros" y que los habitantes de los pequeños y medianos municipios "tengan peor calidad de vida".

"El Gobierno quiere destruir a los pequeños y medianos municipios de Andalucía con estas reformas", ha manifestado Conejo, que ha alertado de que otras actuaciones del Ejecutivo central, como las planteadas en materia educativa y de pensiones, "van en esta misma línea".

En este sentido, ha puesto a Andalucía como ejemplo "de cómo se apuesta por un modelo educativo que garantiza el derecho a la educación pública con los recursos suficientes para que los escolares andaluces puedan acceder al mismo", en contraposición a los postulados del Gobierno central.

En cuanto a las pensiones, también ha criticado que se ponga sobre la mesa un debate cuyo objetivo es "aprovechar la crisis para intentar acabar con el sistema público de pensiones", e igualmente ha situado a Andalucía como modelo de una política opuesta, como demuestra el "compromiso claro y expreso de mantener el complemento a las pensiones más bajas para que la crisis no afecte a los que menos recursos tienen".

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