Turismo ornitológico: con la vista puesta en los cielos de España

  • España cuenta con 598 Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
  • Doñana, Tablas de Daimiel, Delta del Ebro, Picos de Europa, Monfragüe…
  • En Europa hay unos 10 millones de turistas que viajan al año para ver aves.
Avistamiento de aves en Extremadura
Avistamiento de aves en Extremadura
GOBIERNO EXTREMADURA
Avistamiento de aves en Extremadura

El turismo de naturaleza gana cada vez más adeptos. Supone ya entre un 10% y un 15% del tráfico mundial de viajeros y es la opción con mayor crecimiento anual, con porcentajes superiores al 20%. Según la Sociedad Española de Ornitología, SEO/BirdLife, el asociado a la ornitología es el sector con "más pujanza".

Sólo en Europa, se estima que hay unos diez millones de turistas que viajan al año para ver aves, birdwatching, como dicen en inglés. Reino Unido, Holanda y Alemania son los países con más potencial, según datos de la Organización Mundial del Turismo (OMT).

Pero España no se queda atrás y comienza a ser nido de muchos viajeros extranjeros y nacionales que nos visitan cada año. De hecho, los turistas extranjeros suelen quedarse impresionados con aves tan comunes en España como el rabilargo y la abubilla, pero poco conocidos en el resto de Europa.

Nuestro país cuenta con 598 Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que ocupan más de 10 millones de hectáreas, casi un 20% de la superficie terrestre del Estado. No hace falta ser un experto para salir al campo a divisar cualquier variedad de aves. Sin embargo, en compañía de un guía experto en aves y provistos de prismáticos y telescopio y una buena dosis de paciencia, el aprendizaje y la observación es más apasionante.

Por lo general, "las zonas bañadas por marismas llaman más la atención que las secas a los turistas a la hora de avistar aves", explica el técnico de actividades de SEO/BirdLife, Álvaro Díaz Pastor, siendo las aves esteparias las más atractivas. Entre ellas las más representativas son la avutarda, el sisón común, el aguilucho o la codorniz.

Las provincias de Castilla-La Mancha  –con las Tablas de Daimiel– y Andalucía –con Doñana como principal atractivo– son zonas húmedas donde el águila imperial es una de las protagonistas. El Delta del Ebro o los Picos de Europa también son algunas de las zonas más transitadas por los observadores.

Los embalses y humedales próximos a Monfragüe (Cáceres) nos ofrecen aves de la campiña como el críalo, alcaudones reales y comunes, el incesante canto de los trigueros y el inconfundible reclamo del cuco.

En Aragón, destaca la Reserva Natural de la Laguna de Gallocanta, entre las comarcas de Campo de Daroca y Jiloca. Cuenta con más de 220 especies de aves, entre las que destacan: buitres, águilas, grullas, abubillaz y fochas.

En la castellana comarca de Tierra de Campos, uno puede pararse a avistar aves en la Reserva Natural de las Lagunas de Villafáfila, en Zamora. De la avutarda, el cernícalo primilla o el aguilucho cenizo, pasando por la cigüeñuela, la avoceta, el aguilucho lagunero, la avefría, el azulón, el zampullín y tantos más.

De noche, la Sierra de Guadarrama ofrece un auténtico espectáculo de rapaces nocturnas como los mochuelos, los cárabos y los autillos o incluso mariposas, como la más extraña de todas, la mariposa isabelina.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento