El Gobierno de Castilla-La Mancha invertirá unos 400.000 euros en 2014 en restaurar el patrimonio histórico-artístico de la Iglesia católica, tal y como lo ha anunciado el consejero de Educación, Cultura y Deportes, Marcial Marín, tras presidir en Toledo la Comisión Mixta Junta de Comunidades-Iglesia Católica.

En una rueda de prensa junto a el Obispo de Ciudad Real, Antonio Ángel Algora, el consejero ha explicado que es la "primera" reunión que se celebra desde la llegada del nuevo gobierno. "Si bien ha habido encuentros anteriores de comisiones preparatorias de la misma", ha dicho.

De este modo, según ha avanzado Marín, en el orden del día se ha establecido la deuda pendiente de los ejercicios 2010, 2011, 2012 y 2013, "así como la previsión de presupuestos para 2014". Asimismo, según ha anunciado, se ha repasado la programación de actuaciones que se harán tanto en bienes muebles como en archivos.

Por otro lado, en el orden del día también se ha incluido "cómo hacer que la ley de patrimonio cultural sea operativa y eficaz en las relaciones Iglesia-Junta", ha informado Marín, quien ha añadido en el orden del día el calendario de reuniones "para agilizar las reuniones de comisión plenaria y de comisión ejecutiva".

"Anunciar que el Gobierno de Cospedal ha satisfecho la deuda pendiente de los años 2010 y 2011 del anterior gobierno socialista y hemos abonado la cantidad de más de 1.000.000 de euros para financiar más de 30 actuaciones", ha dicho el consejero, quien ha añadido que se trata de 976.000 euros "pagados vía los convenios firmados con la Iglesia católica y otros 215.000 euros de subvenciones pendientes para bienes patrimoniales vinculados a la Iglesia".

En este sentido, Marín ha subrayado que se han pagado "590.000 euros para la campana gorda de la catedral de Toledo y 590.000 para la Iglesia del Fuerte de San Francisco en Guadalajara". "Ahora vamos a intentar que toda esta dispersión de subvenciones se acoja bajo el manto de la Comisión Mixta", ha manifestado.

Ley patrimonio cultural

Con respecto a la nueva Ley de Patrimonio Cultural, Marín ha declarado que es "una ley protectora no sólo para los bienes culturales, sino que también queremos que sea protectora para todos los bienes del inventario que ha realizado la Junta y la Iglesia".

Por su parte, Algora, que ha representado a las cinco diócesis castellano-manchegas, ha reconocido que se alegra de "continuar los trabajos". "Quiero expresar mi satisfacción por continuar, porque quiere decir que seguimos manteniendo el pulso y la atención al inmenso patrimonio cultural".