Maliaño de Cable pide ayudas al Gobierno y que les ponga en contacto con inversores privados

Maliaño de Cable, la sociedad laboral constituida por dirección y trabajadores de UGT de B3 Cable para quedarse con esta fábrica de Camargo, han pedido ayudas públicas al Gobierno de Cantabria, que no serían "a fondo perdido", sino "con intención de devolverlas".
B3 Cable
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Maliaño de Cable, la sociedad laboral constituida por dirección y trabajadores de UGT de B3 Cable para quedarse con esta fábrica de Camargo, han pedido ayudas públicas al Gobierno de Cantabria, que no serían "a fondo perdido", sino "con intención de devolverlas".

Además, han solicitado al Ejecutivo que les ponga en contacto con inversores privados, ya que si bien hay "bastantes" empresas y grupos interesados en su proyecto "no llegan" hasta Maliaño de Cable.

Así lo ha explicado a Europa Press Miguel Ángel Muñiz, portavoz de la sociedad laboral y presidente del comité de empresa, que se ha mostrado extrañado por esta situación. "Hay empresas y grupos interesados, pero hasta nosotros no llegan", ha expresado.

"Vienen y, como vienen, se van", ha añadido el sindicalista de UGT, para apuntar que "algo raro está pasando", pues a su juicio, no es normal que muestren interés por la propuesta de Maliaño de Cable pero no lleguen a contactar con ellos.

Ante esta situación, han solicitado al Gobierno que les ponga en contacto con grupos de inversores privados y que estudie si hay alguna posibilidad de articular ayudas públicas, que no serían "gratuitas", sino que confían en devolverlas.

Se lo trasladaron ayer al presidente regional, Ignacio Diego, el propio Muñiz y otros representantes de Maliaño de Cable, en una reunión que ambas partes mantuvieron en el Gobierno y que sucedió a la celebrada un día antes con miembros de Südkabel, la empresa alemana del grupo industrial Wilms que también opta a hacerse con la factoría de B3.

El portavoz de Maliaño de Cable y presidente del comité de B3 ha recalcado que su proyecto apuesta por la continuidad de la planta y el mantenimiento del empleo. Su proyecto contempla reanudar la actividad con 666.000 euros aportados por 37 trabajadores, a razón de 18.000 euros por persona, y contar con inversión pública y privada. El objetivo es contar con una plantilla inicial de 79 empleados, que se podría ampliar hasta 120.

Después de trasladar esto, los trabajadores están a la espera de que el Gobierno les conteste estos días, durante los que mantendrán contacto, pero telefónico o por correo.

En cuanto a la documentación que Maliaño de Cable debe entregar a los administradores concursales de cara a la adjudicación de la factoría, Muñiz ha indicado que este viernes les entregarán todo lo que tengan, y lo que falte se lo harán llegar en los próximos días.

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