La portavoz del PP de Extremadura, Francisca Rosa, ha señalado que es un "contrasentido" que el PSOE critique al Gobierno de José Antonio Monago por los "recortes" en materia sanitaria, cuando los extremeños aún están "pagando sus excesos".

"Quien participó de las fiestas y comilonas a cargo del presupuesto del SES, se aprovechó de maletines de cuero y cató jamones de bellota a cuenta de los contribuyentes extremeños, ahora venga a hablar de recortes sanitarios", ha señalado Rosa acerca del portavoz en materia de Sanidad del PSOE de Extremadura, José María Vergeles, al tiempo que ha añadido que "para recortes los suyos", ya que los extremeños "aún" están "pagando sus excesos y cómo el dinero de la sanidad se lo gastaban en cubatas".

"Es un sarcasmo que Vara y sus meritorios se dediquen durante este verano a criticar todos los esfuerzos y trabajos que el Gobierno extremeño está dando para garantizar y salvaguardar la sanidad pública en la región y mejorar su calidad", ha añadido.

Según la portavoz 'popular', los ciudadanos "tienen la percepción sobre la sanidad y el SES mucho más realista que la socialista, basada en mentiras y paroxismo apocalíptico". "Una oposición destructiva del PSOE que pivota sobre la falsedad y carente de algo positivo para el bienestar y la sanidad de los extremeños".

Rosa considera que los portavoces del PSOE pretenden con sus críticas ganar posiciones de cara a las "primarias socialistas". "Quieren hacer méritos para ser diputados de la oposición, pero las plazas son pocas y los interesados muchos, de ahí su empeño en ver quien dice más barbaridades o denuncia más extravagancias", ha indicado.

"Y no les arredra el desprestigio que su forma de gestionar la sanidad conllevó, ni la deuda de 200 millones de euros que dejaron ni las virutas de jamón que aún asoman al portavoz Vergeles, ni las peculiares contrataciones del Servicio Extremeño de Salud durante los años 2008 y 2009, investigadas por la Fiscalía, sin procedimiento alguno de licitación. De esos detalles el señor Vergeles, participante en los mismos, parece que se ha olvidado".

Para Rosa, "ahora la Sanidad extremeña está en buenas manos, mejor que hace dos años, con un equipo que está reduciendo el déficit, disminuyendo la deuda, pagando en tiempo y forma a proveedores, equilibrando las cuentas y atendiendo a la ciudadanía; frente a ello queda en evidencia la gestión socialista que se reducía a una máquina sanitaria de gastar sin administrar".

El PP reivindica, apunta Rosa, "una sanidad pública, gratuita, universal y de calidad" en los centros sanitarios de Extremadura, "dónde los gastos sanitarios sean los derivados de la atención a los pacientes y no las comilonas a las que el señor Vergeles nos tenía acostumbrados".

Una sanidad, añade, "con infraestructuras adecuadas, ajustadas en sus presupuestos a su función, una sanidad mimada por un gobierno que entiende que Extremadura tiene que apostar por la mejor Salud Pública de calidad".