El presidente de la Unión de Consumidores en Asturias (UCE), Dacio Alonso, ha denunciado, este viernes, el "engaño" de Hidrocantábrico a sus consumidores por el cambio del tipo de contratos, del mercado normalizado al liberado "sin su conocimiento" para así establecer la compañía eléctrica el precio base que ella crean conveniente, al evitar así cualquier competencia.

La UCE, que ha calificado esta situación como un "fraude consentido en beneficio de las compañías eléctricas", ha solicitado la investigación a la Comisión Nacional de la Energía (CNE) de la situación del 80 por ciento de los 130.000 consumidores registrados en 2010 como usuarios de la compañía, a los que "se les ha modificado el contrato sin su consentimiento", de acuerdo con las palabras de Alonso en rueda de prensa en la sede de la UCE.

A raíz de este asunto, esta asociación pondrá en marcha una campaña a partir de septiembre que tiene como objetivo rebajar la potencia, ya que, de acuerdo con la UCE, "el 80 por ciento de consumidores asturianos tiene durante los últimos tres años más potencia de la que necesita" para frenar la penalización que quiere llevar a cabo el Gobierno por incremento de la potencia.

Alonso ha exigido una sanción para HC por "engañar" a la gente y por esta misma razón, ha solicitado "que se vuelva a la tarifa regulada del último recurso que ahora recibe el nombre de precio voluntario al pequeño consumidor". Asimismo, ha reclamado en el marco de esta campaña el pago de una tarifa fija mensual para controlar el gasto.

Aumento de entre 20 Y 30 ?/

Mes más

La subida de la tarifa eléctrica en Asturias, de los 100 euros al mes a los 120-127 euros supone un incremento entre el 20 y el 30 por ciento, es otro de los ajustes de Rajoy que tiene como objetivo cumplir con un déficit que Alonso duda de su existencia.

Esta reforma, que penaliza a los consumidores y bonifica el consumo, que sigue la máxima de "cuanto más consumas, menos pagas" se añade al hecho de que en los últimos años, la tarifa eléctrica ha subido un 60 por ciento, lo que nos coloca, de acuerdo con la UCE, en "el país más caro de la Unión Europea.