El director del Festival Internacional de Benicassim, Vince Power, ha garantizado este domingo la continuidad de la cita musical y ha prometido una gran programación para la edición de 2014 en la que el festival cumple 20 años.

Power ha dicho que el concurso de acreedores por el que atraviesa la empresa organizadora, Maraworld, se superará en breve gracias a los nuevos socios que han comprado el 65% de las acciones y se dará continuidad a uno de los festivales más longevos de España.

El director del FIB ha hecho este domingo estas declaraciones en la tradicional rueda de prensa del último día del festival, en la que ha realizado un balance del certamen.

La organización ha cifrado en unas 35.000 personas por día la asistencia en esta, lo que ofrece una cifra total de 140.000 espectadores en los cuatro días de actuaciones. No en vano el festival es una cita, en la que como dijo este sábado Alex Turner, líder de Arctic Monkeys, "¿quién no querría tocar?".

El festival concluyó este domingo con las actuaciones de The Killers, Jake Bugg, y Woodkid entre otros, aunque sin la rapera Azealia Banks, uno de los nombres más esperados de la jornada, que ha cancelado su actuación debido a una "severa afección de garganta".

El espectáculo de The Killers, el lirismo y la potencia en perfecto equilibrio de Woodkid y el folk puro de Jake Bugg han puesto el cierre a la edición número 19 del FIB espantando los fantasmas y haciendo que los miles de fiberos estén deseando volver a Benicàssim a celebrar por todo lo alto el 20 aniversario de la cita musical.

El plato fuerte, The Killers, no ha defraudado, los superéxitos de la banda de Las Vegas han sonado uno tras otro sin descanso, en un gran show con luces, proyecciones, confeti y fuegos artificiales. Su carismático líder, Brandon Flowers, se ha esforzado hablando castellano, y al saltar a las tablas ha preguntado al público:"¿estáis preparados para lo auténtico?".

El apoyo más directo al FIB ha venido de la mano de los barceloneses Dorian, ya que su vocalista, Marc Gili, ha afirmado durante su actuación que quería "salir al paso de todos los comentarios negativos sobre el FIB en los últimos meses" y ha mostrado su deseo de que la cita "recupere el sentido que ha tenido y que tiene".

En el escenario principal, a primera hora de la noche, Jake Bugg, ese chico de 19 años que promete convertirse en el gran nombre del folk, ha dado una lección de simplicidad y clase pese a su corta edad. Pero la joya de la noche ha sido la genialidad del francés afincado en Brooklin Yoann Lemoine, conocido como Woodkid. Para muchos, la del polifacético músico ha sido la mejor actuación de la presente edición del FIB, que sin duda, ha sido digna del escenario Maravillas.

El sábado, las actuaciones de Arctic Monkeys, Miles Kane y Kaiser Chiefs fueron el ejemplo del espíritu de los mejores años del festival.

Alex Turner, el carismático cantante de Arctic Monkeys, incluso echó un cable al festival y aseguró estar encantado de volver a pisar el escenario Maravillas, en el que, dijo, cualquier artista querría tocar.

Turner se reunió en el escenario con Miles Kane, su compañero en su antigua banda Last Shadow Puppets, en el último tema de su concierto, cumpliendo así con las expectativas del público que abarrotaba el escenario principal y coreaba cada uno de los grandes éxitos que sonaron con una calidad abrumadora.

Durante la mañana miles de fiberos buscaban cualquier sombra en el centro Benicàssim y en la playa debido al intenso calor para recobrar fuerzas de cara a la última jornada festivalera.

Esta edición del FIB, marcada por los problemas económicos de la empresa matriz británica propietaria de Maraworld, ha supuesto un gran esfuerzo para la organización y para los proveedores, según Power, a quienes ha agradecido su comprensión, y quienes, ha afirmado, "han cobrado todo lo que se les debía".

Power ha criticado igualmente la subida del IVA en España, lo que supuesto un 13% menos de ganancias para el festival, que ha tenido que repercutir esta subida en el precio de las entradas.

Del mismo modo, el irlandés ha dicho que será él quien siga como director del Festival durante, al menos, los próximos tres años, en los que trabajará con los nuevos socios, Denis Desmond y SJM Concerts, quienes tienen gran experiencia en la industria y muchos contactos con numerosas bandas.

Si se producen cambios en el festival debido a los nuevos socios, ha dicho Power, "serán para bien".

Por otra parte, el director del FIB ha dicho que su intención es poder retomar la celebración del festival de música heavy-rock, Costa de Fuego, que no pudo llevarse a cabo este año debido a la situación económica.

Igualmente se pretende retomar las actividades extramusicales que también se cancelaron este año, aunque desde Maraworld han apuntado que pueden no desarrollarse del mismo modo que en ediciones pasadas.

Al ser preguntado por la poca presencia de grupos españoles, Power ha dicho que el FIB tiene una finalidad "comercial" y hay que traer a los grupos que "atraigan a más gente".