La dirección de Ascán-Geaser, empresa adjudicataria de la gestión de residuos del Ayuntamiento de Santander, no ha conseguido llegar a un acuerdo con los representantes de los trabajadores a pesar de que ha realizado "el mayor de los esfuerzos posibles" para conseguirlo.

Ese "esfuerzo", según ha manifestado la empresa en un comunicado, ha sido "asegurar unas condiciones laborales óptimas de los empleados sin poner en peligro la viabilidad de la empresa y el mantenimiento de todos sus puestos de trabajo".

Después de negociar durante horas este jueves en el Orecla con el comité de empresa, Ascán-Geaser ha señalado que ha sido "imposible materializar un acuerdo" entre ambas partes porque, según la empresa, "los trabajadores no están dispuestos a renunciar a ninguno de sus privilegios".

A este respecto, ha afirmado que si esos "privilegios" se mantienen "pueden poner en peligro la supervivencia de la empresa y el mantenimiento de los puestos de trabajo", ya que la contrata de la concesión con el Ayuntamiento se renueva el próximo 1 de septiembre y cuenta con "una reducción del 20 por ciento" con respecto a la anterior adjudicación, ha indicado Ascán.

De esta manera, y como "medida de presión", los trabajadores mantienen la convocatoria de huelga para este viernes, 19 de julio, víspera del comienzo de la Semana Grande de Santander, una postura que, a juicio de la empresa, "es intolerante y egoísta porque está muy lejos de adaptarse a la realidad laboral que vive España en la actualidad".