La Universidad de Jaén (UJA) ha decidido este año cerrar todos sus edificios durante este mes de agosto y obligar a su personal de administración y servicios (PAS) a tomarse vacaciones en esas fechas, como medida con la que espera ahorrar unos 50.000 euros.

En concreto, según ha explicado a Europa Press el vicerrector de Infraestructuras, Desarrollo de Campus y Sostenibilidad de la UJA, Nicolás Ruiz, los edificios permanecerán cerrados entre los próximos días 2 y 26 de agosto.

Ruiz ha enmarcado esta iniciativa, de la que este jueves se ha hecho eco el diario 'Ideal', en el conjunto de medidas de ahorro energético que la academia jiennense lleva aplicando "desde hace tiempo", entre las que figuran, según ha puesto como ejemplo, el uso "sólo en días laborables" de la climatización, que, de esta manera, no se utiliza en sábados y festivos salvo de manera excepcional y en "zonas críticas" como laboratorios.

Según ha explicado el vicerrector, el objetivo de que este próximo mes de agosto tan sólo vaya a haber personal de vigilancia en los edificios de la universidad es "intensificar" las medidas que se vienen aplicando para lograr el "máximo ahorro en consumo energético"; de ahí que, este año, se haya dado un paso más respecto a lo adoptado el curso anterior, cuando "se cerraron aulas, pero no edificios de gestión".

Gracias en parte a este tipo de medidas, la academia jiennense cerró el pasado ejercicio presupuestario de 2012 con una reducción del doce por ciento en la partida de gasto corriente respecto a 2011, según datos facilitados por Ruiz, que también ha indicado que los aparatos de aire acondicionado y calefacción de la UJA funcionan "a 21 grados en invierno y a 26 en verano", cumpliendo así "las directivas establecidas al respecto", ya que "cada grado de menos en verano o de más en invierno supone mucho dinero".

Igualmente, la UJA viene velando por que "sólo se usen los espacios que son estrictamente necesarios", de forma que aquellas dependencias en las que actualmente no trabaja nadie por los "ajustes" que se han aplicado en la plantilla "como consecuencia de las restricciones en la tasa de reposición de plazas" permanecen cerradas.

"No hay mejor medida de ahorro energético que no consumir lo que no se necesita", ha subrayado el vicerrector de Infraestructuras, que también ha indicado que se ha reducido la "intensidad lumínica" en los aparcamientos, así como se "ha intensificado" el uso de un sistema automático de gestión de iluminación para que las luces se enciendan o apaguen al detectar el paso de personas, y se están usando sistemas de luz de bajo consumo frente a los convencionales.