Los expertos de las Fuerzas de Seguridad del Estado que investigan el atentado del pasado día 30 en el aparcamiento de la Terminal 4 del aeropuerto de Madrid-Barajas creen que fue elaborado y perpetrado por seis miembros de ETA, según informa El Mundo.

Según esta hipótesis, tres de los terroristas habrían participado en el secuestro del propietario de la furgoneta que más tarde harían explotar en el parking de la T4. Dos de ellos permanecieron junto al secuestrado hasta el sábado por la mañana, cuando se ejecutó el atentado. El tercero y, al menos, otro más, viajaron a Madrid en la furgoneta.

Al mismo tiempo otros dos etarras se desplazaron a Madrid en un coche particular, en el que después regresarían de vuelta al País Vasco.

Un plan sin fisuras

Los expertos que trabajan en la investigación señalan que ETA realizó una completísima labor de información sobre el terreno antes de materializar su plan.

Así, según explicó la Guardia Civil, el día 27, miércoles, fue secuestrado el joven de Oñate propietario de la Renault Trafic en la localidad francesa de Luz Ardiden.

Su vehículo fue cargado con más de 200 kilos de explosivo, de un tipo aún no determinado, que constituye la mayor carga explosiva utilizada por ETA en los últimos quince años.

Las cámaras de seguridad de la Terminal 4 muestran cómo la furgoneta fue aparcada sobre las 19.00 horas del día 29, viernes, unas 14 horas antes del atentado que voló el parking de la T4 y que provocó la desaparición de dos ciudadanos ecuatorianos, Diego Armando Estacio y Carlos Alonso Palate.

Aunque los bomberos que trabajan en las tareas de desescombro ya han retirado más de 2.000 toneladas de material, todavía no han hallado rastro alguno de ellos, y las esperanzas de hallarlos con vida son prácticamente inexistentes.

Una reunión extraordinaria

Por su parte Alfredo Pérez Rubalcaba, ministro del Interior, ha convocado a todos los grupos parlamentarios a una reunión extraordinaria que se celebrará el próximo martes día 9 de enero para analizar la situación tras el atentado, después de que Rodríguez Zapatero ordenara suspender el diálogo con ETA .