La Asociación de Consumidores de Navarra Irache recomienda a los usuarios que, antes de activar el servicio de 'roaming' y usar el teléfono móvil en el extranjero, bien sea para llamar o para conectarse a Internet, soliciten por escrito los precios que les va aplicar su compañía, especialmente si van a estar fuera de la Unión Europea.

Durante las fechas veraniegas, según ha destacado Irache en una nota, "se multiplican las quejas de los consumidores por facturas telefónicas abultadas tras su estancia en otros países".

La asociación ha explicado que "en principio, dentro de la Unión Europea se aplican por defecto unas tarifas que no pueden superar los 29 céntimos al minuto por realizar una llamada, 8 céntimos por recibirla y 9 céntimos por enviar un mensaje de texto -que serán de 24, 7 y 8 céntimos respectivamente a partir del 1 de julio-".

Por su parte, conectarse a Internet, según Irache, "no podrá costar más de 70 céntimos por megabyte -45 a partir del 1 de julio- y las compañías tendrán que avisar al consumidor cuando éste supere el 80% del límite de consumo que, por defecto y si el usuario no ha determinado otra cantidad, será de 50 euros".

En cualquier caso, ha advertido la asociación, "actualmente las compañías deben enviar un mensaje informativo sobre los precios que aplicarán cuando el usuario entra en un país de la Unión Europea". Desde Irache se considera que las empresas "deberían informar de la misma manera cuando el cliente se encuentre en un tercer país".

Además, la asociación ha destacado que los precios máximos señalados no son aplicables cuando el consumidor sale de la Unión Europea. Por ello, en estos casos "es especialmente aconsejable que, antes de salir al extranjero, el consumidor se informe y tenga por escrito las tarifas que le aplicará su compañía, para poder reclamar en caso de posibles irregularidades", ha insistido.

Irache ha puesto de relieve, por otra parte, que "hay zonas especialmente conflictivas en estas cuestiones puesto que el cliente no se da cuenta de que está fuera de la Unión Europea, como es el caso de Andorra, de donde han llegado a Irache facturas exageradas, que han podido ascender en algún caso hasta 14.000 euros".