La Agencia Vasca del Agua (URA) ha concluido la primera fase de las obras de protección ante inundaciones previstas en el río Gobela, en Getxo (Bizkaia), en el tramo Aliviadero Cristóbal Valdés-La Avanzada, en Errekagane.

La consejera de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno vasco, Ana Oregi, ha visitado este jueves, junto al alcalde de Getxo, Imanol Landa, el viceconsejero de Medio Ambiente, Josean Galera, y el director de URA, Iñigo Ansola, las obras de acondicionamiento hidráulico que se realizan en el tramo de Errekagane en el río Gobela para la prevención de inundaciones.

La obra de acondicionamiento hidráulico y mejora ambiental del Río Gobela, en el tramo Errekagane, está siendo ejecutando la Agencia Vasca del Agua, dependiente del Departamento de Medio Ambiente y Política Territorial del Gobierno vasco, en los terrenos cedidos para tal fin por el Ayuntamiento de Getxo y duplicará la sección hidráulica actual de este tramo pasando de 6 metros a 11 metros de anchura, con una profundidad de cuatro metros.

La actuación permitirá incrementar significativamente la seguridad ante avenidas, pudiendo dar salida a las avenidas con período de retorno de 500 años, así como a las avenidas que estuvieron a punto de sobrepasar la cobertura del Gobela en el tramo de Errekagane en junio de 2008 y que se cifraron en un período de retorno de 10 años.

A este respecto, la consejera de Medio Ambiente y Política Territorial ha destacado que "la gestión de la inundabilidad es uno de los retos más importantes al que hemos de dar respuesta como sociedad vasca, incrementando los umbrales de seguridad para las personas e infraestructuras en las áreas más sensibles del país". "Sin duda, uno de ellos es Gobela", ha añadido.

Esta obra de la Agencia Vasca del Agua corresponde a la fase III del "Proyecto de acondicionamiento hidráulico y recuperación ambiental del río Gobela en Getxo", y su importe es de 14.005.640 euros.

Su plazo de ejecución es de 30 meses, distribuidos en 18 meses para la ejecución del tramo Aliviadero Cristóbal Valdés- La Avanzada y 12 meses desde La Avanzada hasta el Puente de Leioa. Se trata de una actuación a lo largo de 762 metros, de los cuales 200 se encuentran actualmente en cobertura, que atraviesa una trama urbana muy densa.

Durante el primer trimestre de este año se ha trabajado en el parque de obra, la reposición de los servicios afectados en el primer sector, así como la definición de las diez fases en las que está dividida esta primera parte de la obra (Aliviadero Cristóbal Valdés-La Avanzada), fases que fueron presentadas a la comisión informativa especial de inundaciones de Getxo el pasado 18 de abril.

La primera de estas diez fases de la obra del tramo Aliviadero Cristóbal Valdés-La Avanzada, consistente en la construcción de las pantallas desde el Aliviadero Cristóbal Valdés hasta la altura de Errekagane número 9, ha finalizado. Gracias al empleo de una pantalladora de grandes dimensiones, se ha culminado la construcción de 47 módulos, cada una de ellas de 2,80 metros de anchura por 0,60 metros de espesor por 11 metros de profundidad.

Según ha explicado Iñigo Ansola, esta obra "ha supuesto la necesidad de extraer 910 m3 de arenas, inyectar 910 m3 de lodos bentoníticos, la utilización de 90 toneladas de armadura, el transporte y puesta en obra de 910 m3 de hormigón, en un espacio muy reducido para una obra de esta entidad, ya que el espacio habilitado para el parque de maquinarias es de aproximadamente 1.400 m2, donde el trabajo se tiene que realizar unidireccionalmente, lo que nos lleva a tener que secuenciar cada movimiento de obra, tratando de que las molestias a la ciudadanía sean las menores".

Ansola ha pedido "paciencia" al vecindario por las molestias que las obras pudieran ocasionarles y ha asegurado que es "totalmente consciente de los inconvenientes que generan este tipo de obras".

Según ha explicado, están tratando de comunicarles puntualmente los trabajos que se están realizando, las molestias y afecciones que se están generando, porque "merece la pena, pues con ella desaparecerán los problemas de inundaciones a los que están sometidos periodicamente los vecinos". "La capacidad hidráulica de esta zona es insuficiente para las avenidas recurrentes y es deber de todos solucionar esta situación", ha concluido.