Los Mossos d'Esquadra detuvieron el pasado sábado en Lleida a un ladrón reincidente por presuntamente robar teléfonos móviles arrancándolos a sus dueños en plena calle aprovechando un descuido, y ya ha ingresado en prisión por orden judicial, ha informado la policía catalana.
El 15 de junio, el hombre, de 38 años y vecino de Lleida, abordó a una víctima y le arrebató el teléfono, y cuando ésta le persiguió, le amenazó con una navaja y consiguió huir.
El detenido, al que localizaron unas horas después en el Eix comercial de Lleida y le encontraron encima un móvil robado, ingresó en prisión tras pasar a disposición judicial y le atribuyen tres delitos de robo con violencia e intimidación y tres hurtos.
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