El secretario general de CCOO en Andalucía, Francisco Carbonero, ha vuelto a negar este miércoles que su sindicato haya cobrado "un solo euro por algo ilegal", y "mucho menos en relación a cualquier factura" de los expedientes de regulación de empleo (ERE) irregulares tramitados con dinero autonómico, y ha advertido de que "si se le llama 'conseguidor' a buscar que los trabajadores salgan de las empresas en las mejores condiciones, lo mejor que se puede hacer es ilegalizar a los sindicatos", porque éstos, ha añadido, "no van a renunciar nunca a defender los intereses de los trabajadores".

Carbonero se ha pronunciado de esta manera en Sevilla en una rueda de prensa ofrecida junto a la consejera andaluza de Fomento y Vivienda, Elena Cortés, con quien ha mantenido una reunión, y después de que los periodistas le hayan preguntado por las referencias al papel de los sindicatos en la presunta trama de los ERE fraudulentos que incluye la juez encargada del caso, Mercedes Alaya, en el auto en el que decreta el ingreso en prisión del dueño de Uniter, José González Mata, dictado este martes.

Frente a lo que sostiene la juez sobre la "actuación decisiva" que habrían tenido tanto UGT como CCOO en el "ilícito uso de fondos públicos", el secretario general de CCOO-A ha reiterado que su organización "absolutamente nunca ingresó un solo euro por nada ilegal, y mucho menos en relación a cualquier factura de los ERE".

Además, ha insistido en señalar que el sindicato "no conoce ni sabe quiénes son" los dirigentes de las mediadoras que supuestamente habrían realizado pagos a CCOO y UGT, hasta tal punto de que "los están conociendo a través de los medios de comunicación" en estos días.

Al hilo de ello, Carbonero ha defendido que aquellas "federaciones estatales de CCOO que hayan facturado algún servicio por alguna actuación, lo han hecho desde la legalidad y lo han declarado en el impuesto de sociedades".

Por último, el líder de CCOO en Andalucía ha advertido de que su sindicato "no va a renunciar nunca a defender los intereses de los trabajadores", porque "la función histórica que tienen el movimiento obrero organizado y los sindicatos de clase es defender los intereses de los trabajadores", ha apostillado.