Cuando hay prosperidad gastamos con alegría y ante un imprevisto tal vez en lugar de arreglar se compra otro. Es lo que haríamos con un electrodoméstico. Pero ahora, en plena crisis, todo se repara porque tiene que durar. La misma idea se puede aplicar al mantenimiento de nuestra vivienda. Los datos así lo indican. Con la crisis, las reparaciones en los hogares han aumentado un 10%.

Según Reparalia, el número de reparaciones ha crecido un 10% en los dos últimos años, con un gasto medio de 209 euros en reparaciones al año. Esta empresa, especializada en la comercialización de contratos para el cuidado del hogar y en la gestión integral de siniestros, considera que los datos "pueden hacer pensar que, en épocas de crisis, las familias optan por reparar en lugar de renovar".

Las principales causas de estas incidencias son problemas de fontanería, especialmente tuberías (el 39,16% del total) y roturas de cristales (el 14,5%). También figuran la alta frecuencia de reparaciones relacionadas con filtraciones, humedades y daños causados por fenómenos atmosféricos (entre el 3 y el 8%).

Los últimos datos de la compañía reflejan que en épocas de fuertes lluvias aumenta un 19% el número de siniestros de este tipo, cuyas reparaciones, además se encuentran entre las más costosas.

Madrid, con un 17,5% de incidencias, lidera el ranking de las provincias españolas con mayor número de reparaciones, según Reparalia. Por detrás se sitúa Barcelona, con un 16,8% de incidencias, seguida de Sevilla, Valencia, Alicante, Cádiz, Vizcaya y Tarragona.