Siete agentes de los Mossos d'Esquadra resultaron heridos la noche del lunes mientras procedían a la detención de un presunto autor de abusos sexuales a un menor en Badalona (Barcelona). Unas 300 personas de la comunidad gitana esperaban al detenido a la puerta de su casa y lanzaron a la comitiva todo tipo de objetos.

El gentío intentó linchar al detenido en el  momento en que salía para ser trasladado a comisaría. Este trayecto se hizo bajo una lluvia de huevos, jarrones y sillas y los golpes y empujones de los concentrados. El detenido acabó con un corte en la parte posterior del cuello y un pómulo contusionado. Las lesiones de los agentes no son graves.

Los agentes de los Mossos d'Esquadra que se han desplazado la noche del lunes al barrio de Sant Roc de Badalona para detener a un hombre acusado de abusar de un menor han acabado sudando de lo lindo para conseguir llevarlo hasta comisaría de una pieza.

A las puertas de la vivienda de la calle Córdoba, donde se produjo la detención, se concentraron más de 300 personas, de etnia gitana, que querían tomarse la justicia por su mano y linchar al presunto pederasta.

El instante más crítico se desencadenó cuando recorrieron la distancia que separa el domicilio del coche patrulla donde se hizo el traslado. Fue entonces cuando se abalanzaron sobre el detenido e intentaron arrancarlo de las manos de los policías. En el transcurso de la lucha golpearon al detenido en la cara y le hicieron un corte en la parte posterior del cuello. Todo el trayecto se hizo bajo una intensa lluvia de jarrones, sillas y huevos.

Siete agentes de los Mossos acabaron heridos de poca gravedad después de un incidente en el que se vivieron momentos de mucha tensión. El hombre ya está en comisaría a la espera de pasar a disposición judicial.