Hasekura Tsunetaka, descendiente de decimotercera generación del embajador Hasekura Tsunenaga, quien 400 años atrás encabezó la embajada Keicho a España, ha visitado este viernes Espartinas (Sevilla), en el marco del año dual España/Japón, siguiendo las huellas del cabecilla de la famosa expedición.

Hace 400 años, la embajada Keicho, encabezada por el samurai Hasekura Tsunenaga, partió hacia España para visitar lugares como Coria del Río, Sevilla y finalmente Madrid, donde la embajada fue recibida por la corte de Felipe III. La embajada partió de Japón en octubre de 1613 con destino a España, llegando a Sevilla en 1614. Hasekura Tsunetaka, descendiente de decimotercera generación del embajador Hasekura, es uno de los protagonistas de los actos institucionales del año dual España/Japón que se celebra estos días.

Año dual españa/JAPÓN

Así, el jueves Hasekura Tsunetaka visitaba Coria del Río como antesala de la visita que este mismo viernes protagoniza a la localidad ribereña y a Sevilla capital el príncipe heredero de Japón, Naruhito. Así, mientras el príncipe heredero de Japón sigue con su visita institucional, Hasekura Tsunetaka ha visitado este viernes la localidad aljarafeña de Espartinas, donde según los historiadores residió durante cerca de un año el embajador Hasekura a la vuelta de su viaje por el Viejo Continente.

Hasekura Tsunetaka, así, ha visitado el monasterio de Loreto, para conocer "de mano de los frailes cómo era la vida de su antecesor en este lugar", según informa en un comunicado el Ayuntamiento. El descendiente del embajador ha visitado además una finca propiedad de la familia del monje que acompañó a la embajada, así como la Casa de las Monjas, donde se ha proyectado el futuro "centro de interpretación Hasekura, en el que se explicará a través de paneles informativos y material didáctico la estancia de la embajada Keicho en esta localidad aljarafeña. Otro punto de interés ha sido el Parque del Teso, donde se ha proyectado un parque japonés, con especies autóctonas alrededor de un lago artificial, que ya se encuentra construido.

La huella de hasekura

Recientemente ha visto la luz el libro "La estancia de la Embajada Keicho en Espartinas", obra del historiador Ángel Luis Schlatter Navarro. En esta investigación, Schlatter desvela la existencia de una primera estancia de Hasekura y su séquito en Espartinas, —en concreto en la hacienda de Mexina—, recién llegados de Japón (noviembre de 1614), así como multitud de detalles y circunstancias relativas a los casi trece meses que permanecieron en Espartinas (entre el monasterio de Loreto y la hacienda de Mexina) antes de regresar a su país de origen (junio 1616-julio 1617).