El Taller Escuela de Cerámica de Muel de la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) acoge esta tarde la inauguración de la exposición 'Maestros de la Cerámica y sus escuelas: Elena Colmeiro', que permanecerá abierta en la sala Enrique Cook del Taller Escuela hasta el próximo 3 de noviembre. La diputada delegada de la Escuela Taller, Marta Pardo, presidirá el acto inaugural.

Después de las muestras de Enric Mestre, Arcadio Blasco, Ángel Garraza, Elena Colmeiro (Silleda, Pontevedra, 1932) es ya la cuarta protagonista de la serie 'Maestros de la Cerámica y sus Escuelas"', que gira en torno a seis grandes exponentes de la cerámica contemporánea española. Todos ellos son nombres que han recibido múltiples reconocimientos a su trayectoria, y una referencia indispensable en el panorama de la cerámica contemporánea nacional, tanto por su obra como por su influencia artística y personal sobre otros autores.

Además del conjunto de obras de Elena Colmeiro como maestra, el Taller de Muel ofrece un buen número de trabajo de algunos de sus alumnos, entre ellos María Oriza, Miguel Vázquez, Gregorio Peño, Sara Bissau, El Tinglao y Xavier Toubes. Las obras podrán contemplarse de lunes a sábado de 10.00 a 14.00 y de 16.00 a 19.00 horas, y los domingos y festivos de 10.00 a 14.00 horas.

Lo que no se ve

"Me interesa más lo que no se ve que lo que se ve", fue el primer auto aprendizaje de Elena Colmeiro en la Escuela de Nacional de Cerámica de Buenos Aires, donde las largas horas de práctica en el torno le hicieron descubrir en el interior de sus propias piezas, como reacción a la perfección que se le imponía, texturas, huellas y surcos que olvidados del perfeccionismo, conseguían más emoción que el exterior.

Ese juego del surco, de la pieza abierta y desgarrada, le acompañará en su obra a lo largo del tiempo. En ocasiones con forma circular, pero en otros momentos ese descubrimiento interior es llevado a cabo con ladrillos de construcción frescos mostrando otra lectura o con elementos industriales.

Buscando en lo que no se ve, Elena ha trabajado impulsivamente con y en desechos de fábricas de cerámica, de ladrillos o de fundición de vidrio. El artista traslada su lenguaje hasta adaptarlo a un material con el que se siente cómodo y unido. En el caso de Colmeiro, esa comunión se produce antes, ya que es con el propio material de desecho en forma de ladrillo húmedo deformado, elementos de carburo silicio, con el que Colmeiro dialoga, lo deja reposar, en ocasiones durante años, con lo que consigue no forzar ni el material ni la capacidad de comunicación de la obra.

Distintas generaciones

Los seis autores que acompañan a Colmeiro representan distintas generaciones dentro de la cerámica. Por un lado, Xavier Toubes, con una vasta obra y experiencia internacional, el cual podría formar parte de una hipotética segunda parte de este proyecto expositivo; Miguel Vázquez, cuya obra totalmente libre ha transcurrido también por caminos como la instalación y la video creación; El Tinglao, formado por Jorge Pérez y Emilia Guimerans, que junto a Vázquez son uno de los pilares dinamizadores de la cerámica en Galicia, que unen cerámica y fotografía en un discurso donde el soporte adquiere tanta importancia como la imagen; y María Oriza, que mezcla la ilusión de un material rígido con formas flexibles a la vez que un juego de simetrías y efectos ópticos leídos desde una visión escultórica.

Por otro lado, aunque con lenguajes totalmente diferenciados, exponen también Sara Biassu y Gregorio Peño, jóvenes artistas a los que Elena Colmeiro tiende la mano en una apuesta por una obra seria y madurada.