En Salamanca, con un plan distinto: ejercicio y aventura

Sí, Salamanca es una joya de nuestro patrimonio cultural y conocerlo es la principal razón para visitarla. Pero Salamanca es más: una ciudad donde estudiar, una ciudad desde donde conocer la naturaleza de la provincia o donde divertirse. Y no solo por su marca nocturna. Tiene también una extensa oferta de deporte y multiaventura.

Lo más tranquilo: paseo fluvial en bici

A pesar de su nombre, el paseo fluvial en bicicleta no invita a zambullirse en el río montado en una, sino a recorrer su cauce en el carril habilitado a tal efecto. El paseo fluvial, recientemente ampliado, recorre la ribera en paralelo al río Tormes.

Lo más relajante: piragüismo por el Tormes

Volvemos al Tomes, no para recorrerlo en bici por su ribera sino para embarcarnos en piragua. El Tormes es navegable con piragua desde El Barco de Ávila (en la provincia homónima) hasta Alba de Tormes, ya en Salamanca. El recorrido, que no entraña complicación alguna, es de una gran belleza y permite al piragüista disfrutar del paisaje. Puede realizarse en una jornada y está disponible todo el año.

En piragua, atravesaremos las lagunas de Solana y Becedas, rodeadas de fresnos y robles. Siguiendo el transcurso del Tormes, se llega al embalse de Santa Teresa, para pasar después por Alba de Tormes. El río sigue su curso hasta Capio Bernardo y Cilloruelo, poco antes de adentrarse en Salamanca.

Lo más variado: todos los deportes en Salas Bajas

Se trata de un complejo polideportivo al aire libre con todo lo necesario para mantenerse en forma. Consta de dos pistas polideportivas con suelo de resina sintética, cuatro pistas de tenis, campo de rugby, campo de fútbol, pistas de atletismo, un circuito de carrera continua y una exclusiva zona para practicar tiro con arco.

Lo más guerrero: batallas de 'paintball'

En la guerra de pintura o paintball se trata de disparar y quedar limpio de pintura. Como en una guerra de guerrillas, se disparan bolas de pintura al enemigo. Las partidas duran entre 10 y 15 minutos, aunque se realizan descansos para reponer fuerzas, tomarse un refresco y recargar las "armas".

En Salamanca podemos disfrutar de estas guerras en el campo La Fortaleza o La Trinchera y en Torrecilla Paintball. En este último, tienen una parcela de más de ocho hectáreas con cuatro escenarios diferenciados: el speedball, la trinchera, la fortaleza y el frondoso bosque.

En el campo La Fortaleza o La Trinchera, la oferta es parecida. Todo con las medidas más estrictas de seguridad, para no correr riesgos: petos protectores de pecho, máscaras y buzos serán el uniforme de guerra en esta batalla sin cuartel.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!