Responsables de los sindicatos UGT y Comisiones Obreras han alertado este jueves en Logroño que la administración local española está perdiendo en este momento unos 220 trabajadores al día, una cifra que, según sus cálculos, podrá aumentar hasta los 350.000 en total con la entrada en vigor de la futura reforma.

En rueda de prensa, ofrecida con la Junta de Personal del Ayuntamiento de Logroño, el secretario general del sector estatal de la Administración Local de la Federación de Servicios a la Ciudadanía de CCOO, Joan Gasull, ha considerado este anteproyecto de ley, "del que ha habido ya 11 borradores desde el primero, en junio de 2012", como "un ataque a la democracia".

Ha señalado que "los pueblos pequeños, de hasta 20.000 habitantes, perderán servicios que actualmente tienen", a lo que ha sumado la "preocupación" porque muchos de estos servicios, además, "van a venir con un precio tasado, se está buscando un modelo de rentabilidad económica y no de rentabilidad social", que, "de facto, va a suponer que la mayoría de los pequeños municipios van a desaparecer".

"Es un ataque muy grave a los ciudadanos que van a perder servicios o calidad de los servicios, que incluso podrían pasar a la gestión privada", ha insistido Gasull, quien ha citado "datos de la EPA" para alertar que "con los últimos datos antes de la aplicación del anteproyecto, se están perdiendo 221 puestos de trabajo diarios en la administración local, si seguimos así serán 91.000 a fin de año".

Con estas cifras, ha afirmado "no entender la razón de estos recortes, de esta carga de profundidad no sólo contra los trabajadores, sino contra todos los ciudadanos", por lo que, desde Comisiones Obreras, "hemos empezado una campaña de sensibilización y recogida de firmas" contra la reforma local.

Por su parte, el representante de FSP-UGT, Jesús García, ha subrayado que "el sometimiento de los municipios al coste estándar de los servicios esconde la privatización o la externalización de los servicios, que es el objetivo final de esta ley, que va a tener como efecto además la pérdida de competencias".

Un resultado, a su juicio, "que va a suponer pérdida de recursos financieros por un lado, y, por otro, traspaso de personal a diputaciones o, en el caso de comunidades uniprovinciales como La Rioja, a las comunidades autónomas", una situación frente a la que ha exigido "una mesa de negociación para ver en qué condiciones se va a dar el traspaso de trabajadores".

Aunque ha apuntado que en el caso riojano, la repercusión de todas las medidas incluidas en la reforma local "va a ser mínima, porque aquí ya se llevan haciendo externalizaciones hace años y, además, funciona un modelo muy oportuno, que es la mancomunización", ha alertado que la entrada en vigor de la ley "va a suponer la pérdida de 350.000 puestos de trabajo en la administración local".

El representante de Comisiones Obreras en la Junta de Personal del Ayuntamiento, Joaquín Sánchez, ha señalado que, en el caso del Consistorio logroñés "nuestra inquietud es la misma que en otros municipios, que peligren puestos de trabajo en primer lugar, y, luego, las condiciones en las que va a quedar la tarea que se desempeñe".

A esto ha unido que "los servicios que ahora se están dando con calidad razonablemente buena, si no se pagan no se van a dar" y que "al final, con la reforma, más que solucionar la administración local, lo que van a conseguir es desmantelarla y la van a complicar". "Además, la están haciendo sin contar con los empleados públicos", ha concluido.