Los dos rechazos en el Congreso a la tramitación de la iniciativa legislativa a favor de recoger el derecho de autodeterminación en el Estado no han paralizado la intención de BNG, ERC y Amaiur de conseguir una solución "pacífica y democrática" de las "naciones" gallega, catalana y vasca, y por ello, han reconvertido esta iniciativa en una proposición no de ley que defenderán en la Cámara Baja, para que sea el "canal de solución".

Con ella, pretenden, entre otras cuestiones, que se respete la convocatoria y ejercicio de referendo de autodeterminación nacional y se "reconozca y respete que las naciones tienen el derecho de determinar libremente su estatus político".

En un acto en Santiago de Compostela, al que acudió una nutrida representación de alcaldes, diputados y cargos del BNG, las tres formaciones han presentado esta propuesta bajo la advertencia de que, como explicitó la diputada gallega en las Cortes Rosana Pérez, estos "grupos políticos agotarán todas las posibilidades legales" para conseguir el reconocimiento del derecho a decidir.

El portavoz nacional del BNG, Xavier Vence, ha explicado que esta iniciativa pretende ser un "canal para una solución" a las diferencias, y para evitar la "ruptura unilateral" si se persiste en el "neocentralismo madrileño". Por su parte, el portavoz de ERC en el Congreso, Alfred Bosch, ha incidido en que "no va contra nadie" y ha señalado que "no se trata de competir por quién la tiene mayor, más gorda o más larga; sino por quien tiene la mejor democracia, sanidad y estado de bienestar".

En cuanto a Amaiur, el diputado Jon Iñátirru lamentó que desde Madrid "siempre" se recibe por respuesta "la negación y la imposición", y tras explicar que en Euskadi el proceso soberanista todavía está en otra fase distinta a la de Cataluña, la posterior al "terrorismo y violencia de varias partes", ha incidido en que "la democracia (que defienden) no tiene cabida en la democracia de Madrid". "Por eso queremos un estado vasco", ha proclamado.