La crisis y sobre todo el paro siguen empujando a miles de inmigrantes a abandonar la ciudad de Valencia para regresar en muchos casos a sus países de origen.

Y es que, según los últimos datos publicados por la oficina estadística del Ayuntamiento (www.valencia.es), la capital valenciana cuenta a 1 de enero de 2013 con 794.228 habitantes censados, 4.960 menos que el año anterior.

Este es el cuarto descenso consecutivo que registra la ciudad, que en 2009 alcanzó su máximo histórico, con 815.440 personas censadas. Desde entonces, la caída acumulada ha sido del 2,6%.

Los inmigrantes conforman el grueso de la pérdida de población. De hecho, de los 108.449 habitantes extranjeros que había en la ciudad hace un año, se ha pasado a los 103.944 actuales.

De esta forma, el 90% de los 4.960 ciudadanos que han abandonado Valencia son foráneos. De las cinco nacionalidades más numerosas bajan todas salvo la italiana, quinta con más integrantes con 5.954 habitantes, 40 más que hace un año.

Los rumanos siguen siendo mayoría con 12.176 censados (bajan un 4%), seguidos de los bolivianos, con 10.396 (caen un 8,2%), ecuatorianos con 8.903 (14% menos) y los colombianos, con 6.980 censados (bajan un 9,6%).

Pakistaníes y chinos, al alza

Los ciudadanos pakistaníes y los chinos son de los pocos que han roto la tendencia a la baja que presentan las nacionalidades mayoritarias empadronadas en Valencia. Los pakistaníes, sextos más numerosos, alcanzan ya los 5.666 censados, con un aumento del 6,6% respecto al año pasado. Los chinos, séptimos más numerosos, ascienden a 5.373, un 1,1% más.