El alcalde de Alcalá de Guadaíra (Sevilla) y portavoz adjunto del PSOE en el Senado, Antonio Gutiérrez Limones, ha censurado este martes la "indignidad" de la empresa de sanitarios Roca y ha mantenido que con el cierre de las plantas de Alcalá de Henares y Alcalá de Guadaíra se escribe "una de las páginas más negras de la historia de la industria española".

Tras reunirse en Madrid con los trabajadores concentrados durante la celebración del juicio, el regidor socialista ha lamentado que "ha quedado claro que la empresa no ha tenido ninguna intención de negociar ni de alcanzar ningún tipo de acuerdo".

"Roca se limitó a cumplir las prescripciones propias para poder presentarse ante al juez y alegar que ha intentado negociar", ha señalado el senador, que ha manifestado su deseo de que se "haga justicia" y se declaren nulos los cierres de las fábricas en ambas localidades.

En la misma línea, ha apuntado que "hoy Roca ha tomado la decisión de convertirse en una empresa extranjera en su propio país" y ha indicado que "resulta extraño" que haya decidido cerrar las factorías en toda España a excepción de la fábrica ubicada en Cataluña.

En este punto, ha ironizado sobre la posibilidad de que Roca vaya a ser el emblema del independentismo catalán y la bandera empresarial del posicionamiento político del Presidente de la Generalitat, Artur Mas.

"enorme injusticia social y económica"

A su juicio, este caso pone de manifiesto una "enorme injusticia social y económica" que afecta a cientos de trabajadores y de familiares y ha añadido que "es impensable que una gran multinacional como Roca cierre las plantas que tiene en su país de origen".

Para el regidor, también es "una injusticia ética y moral porque, en esta situación de crisis como la que estamos viviendo, es difícil de entender que Roca cierre sus plantas alegando que no hay consumo interno mientras que mantiene abiertas las fábricas de Portugal que tienen un consumo interno igual o inferior".

Así, ha lamentado que "la historia de Roca, una historia de éxito colectivo y de orgullo nacional, se haya convertido en una historia de ingratitud y deslealtad" marcada por la decisión de cerrar las plantas. "Es una pena que una empresa que ha ganado tanto a lo largo de su historia, en un momento de crisis nacional, no se decida a arrimar el hombro para superar juntos esta situación", ha apostillado.