José Mujica, presidente de Uruguay: "Venimos a decirle a España que nos defienda en los acuerdos europeos"

Reivindica el papel pujante de América del Sur tras años de "división y parálisis" que le obligaron a "volver a empezar"
SANTIAGO09,30 h.- O presidente da Xunta, Alberto Núñez Feijóo, e o president
SANTIAGO09,30 h.- O presidente da Xunta, Alberto Núñez Feijóo, e o president
XUNTA/Photographer: xoan crespo
SANTIAGO09,30 h.- O presidente da Xunta, Alberto Núñez Feijóo, e o president

El presidente de Uruguay, José Mujica, ha vinculado su visita a España con la voluntad de recordar a Europa que "América del Sur existe" y la petición a España de que haga una "defensa" de la misma en el marco de la negociación "de los acuerdos con la Comisión Económica Europea", con el fin de lograr un "equilibrio necesario" en el "nuevo mundo" que se crea "con la globalización".

"Venimos a España a decirle que nos defienda en los acuerdos con la Comisión Económica Europea, que Europa no se olvide que América del Sur existe porque la necesitamos, pero sobre todo necesitamos equilibrio en el mundo que se está creando", ha sentenciado Mujica, en un encendido discurso, ante medio centenar de compatriotas y numerosas autoridades, en la inauguración de la Plaza de Uruguay en la capital gallega.

Tras emplazar en la pasada jornada a la Comunidad Económica Europea a que selle con Mercosur un acuerdo de asociación y comercio que "hace 10 años que se está discutiendo", Mujica ha insistido este lunes que su viaje institucional a España "no es casual", sino que responde a la necesidad de ampliar lazos y tener "una visión de carácter internacional" en la civilización "de corte planetario" que se está creando.

"No estamos aquí por casualidad, no salimos por casualidad a mover el chasis con 78 años porque envejecer es no querer salir de casa", ha subrayado el presidente uruguayo, ante la mirada atenta del jefe del Ejecutivo autonómico, Alberto Núñez Feijóo, y otras autoridades, que pudieron escuchar como Mujica advertía que sellar nuevos no implica "perder la identidad", sino, por el contrario, "luchar por ella".

"tierra refugio"

En este escenario, ha reivindicado los "años gloriosos" de América del Sur y, en concreto de Uruguay, entre 1920 y 1930, cuando hubo años en los que este país "recibía 50.000 emigrantes", en su "inmensa mayoría jóvenes y pobres" que huían "de la desgracia de Europa" y llegaban al otro lado del Atlántico "soñando con construir su América".

"Nos llamaban la Suiza de América, pero quedamos congelados en el tiempo, de 1950 en adelante los términos de intercambio nos eran desfavorables y perdimos el norte de nuestra propia democracia, nos desgarramos en el conflicto quedamos divididos y tuvimos que volver a empezar", ha contrapuesto, para añadir que ahora "en eso se está".

Decisiones comunes

Aún "sin tocar el cielo con la mano", el presidente uruguayo ha defendido que hoy América del Sur vive "una coyuntura que no vivió en su historia" puesto que "por primera vez", ante cualquier diferencia, "se junta" y los presidentes "más diversos" se sientan alrededor de una mesa "común, pelean y toman decisiones".

Por ello, ha defendido que "vuelve a ser tierra de refugio" y ha esgrimido que "en un momento de globalización", un país "pequeño" como Uruguay es consciente de que hay que "multiplicar lazos".

En esta tarea, ha destacado que "no podía dejar de venir" a País Vasco y a Galicia, "por la cultura, historia y apellidos" comunes entre Uruguay y ambos territorios de España.

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