El Ayuntamiento de Mérida sanciona a tres miembros del 'Campamento Dignidad' tras recibir "denuncias vecinales"

El Ayuntamiento de Mérida ha abierto un expediente sancionador a tres miembros del Campamento Dignidad de la ciudad ante las "denuncias vecinales" que ha recibido por "malos olores, insalubridad y un mal uso de la vía pública" por parte de los miembros de este campamento.
Veicealcalde de mérida, raquel bravo
Veicealcalde de mérida, raquel bravo
EUROPA PRESS
Veicealcalde de mérida, raquel bravo

El Ayuntamiento de Mérida ha abierto un expediente sancionador a tres miembros del Campamento Dignidad de la ciudad ante las "denuncias vecinales" que ha recibido por "malos olores, insalubridad y un mal uso de la vía pública" por parte de los miembros de este campamento.

Así lo ha explicado, en declaraciones a Europa Press Televisión, la vicealcaldesa de Mérida, Raquel Bravo, quien ha añadido que los vecinos de la zona de Nueva Ciudad (donde estaba ubicado el campamento) "han tenido que estar aguantando malos olores, insalubridad y un mal uso de la vía pública", por lo que el Consistorio ha abierto "un expediente en la garantía que tiene que dar esta administración a todos y cada uno de sus vecinos".

"Lejos de llamarlo Campamento Dignidad nosotros hemos considerado, y no es una cuestión nuestra sino por las reclamaciones de los vecinos de la zona de Nueva Ciudad, que eso más que un Campamento Dignidad era un campamento puramente indigno", ha expresado la vicealcaldesa en alusión al Campamento Dignidad, que ha permanecido instalado a las puertas de la oficina del Servicio Extremeño de Empleo (Sexpe) del Polígono Nueva Ciudad de Mérida hasta que se aprobó la Ley de Renta Básica en Extremadura.

Bravo ha señalado que este expediente "está en curso" y tiene "su plazo de alegaciones", por lo que los sancionados "tendrán derecho a alegar". En cuanto a la multa, ha explicado que "la sanción la establece la ley", y que la cuantía "máxima" alcanzaría los 1.500 euros, "aunque eso no quiere decir que vaya a ser esa", ha matizado.

"Lo que hemos hecho es velar por todos y cada uno de los ciudadanos de Mérida y, en este caso, por los vecinos de Nueva Ciudad que han manifestado reiteradas quejas por la situación que se estaba dando en esa zona de la ciudad", ha resaltado Bravo.

Además, la vicealcaldesa ha asegurado que desde el Ayuntamiento "no" han "entrado a valorar las reivindicaciones de este movimiento político". "No deja de ser un movimiento político al amparo de que sus representantes y la mayoría que los encabezan son miembros de Izquierda Unida", ha destacado.

Los miembros del Campamento Dignidad sancionados por el Ayuntamiento de Mérida son María Luisa Prudencio, el excoordinador de IU Extremadura Manuel Cañada, y el concejal de IU en el Consistorio emeritense Álvaro Vázquez.

"no tiene ningún fundamento jurídico"

Por su parte, Manuel Cañada, uno de los tres sancionados, en declaraciones a Europa Press Televisión, ha asegurado que esta sanción "no tiene ningún fundamento jurídico", ante lo cuál ha considerado que "no va a ir más lejos" y no quieren "darle más importancia".

Así, a pesar de que se podrían enfrentar a una multa de entre 750 y 1.500 euros, según ha señalado, se ha mostrado "convencido" de que "no va a ir a ningún sitio" la citada sanción.

Además, considera que "lo que ha motivado la denuncia" es que el Consistorio, "como el poder político en general" -ha matizado-, "es muy consciente de que se ha organizado un movimiento por los derechos sociales que ha arraigado en la ciudad y en Extremadura y realmente eso es lo que quieren detener".

Cañada ha destacado que tanto sus compañeros como él van a "dedicar el tiempo imprescindible" a hablar sobre este asunto que es "lo que ellos (ayuntamiento) quieren" porque van "a hablar de lo que está pasando que es un problema de honda injusticia social". Así, se ha referido a los desahucios, al desempleo y a la "sangría a los derechos sociales que está sufriendo una parte importante de la sociedad".

En cuanto a la motivación de esta sanción, ha valorado que "ha sido una chapuza" porque "primero" se les "denunció por ocupación de la vía pública" y después se cambió el sentido de la misma y, según Cañada, los han "denunciado por publicidad no autorizada". "La denuncia no tiene ningún fundamento", ha aseverado.

"Lo fundamental es lo que pretenden es que este movimiento no se siga expandiendo y se van a equivocar, se están equivocando", ha subrayado al tiempo que ha explicado que "el movimiento no sólo ha arraigado en los barrios más machacados" sino también entre "la juventud precaria", la "clase obrera", es decir, "entre un sector muy amplio de la población".

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