Sindicatos del sector docente han reclamado a la Conselleria de Educación —durante la celebración de la Mesa Sectorial en la que ser ha presentado el proyecto de un nuevo reglamento de organización y funcionamiento de Escuelas Oficiales de Idiomas (EOI) que sustituirá a la Orden de 2009— la habilitación las "infraestructuras necesarias" para estos centros.

Así, la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSI·F) ha exigido un plan de inversión en infraestructuras para mejorar y ampliar los aularios de las escuelas de idiomas valencianas. También ha solicitado a la administración que reduzca ratios, que acredite como A-2 el nivel de inglés de Bachillerato sin necesidad de prueba homologada y que el departamento pueda aprobar a un alumno capacitado que no pase la certificación.

El sindicato considera "inconcebible que Valencia todavía no disponga de una nueva escuela de idiomas, que Castellón únicamente cuente con una o que muchos alumnos reciban clase en aularios que no cumplen los requisitos mínimos para la enseñanza de idiomas".

CSI·F ha agradecido "el esfuerzo negociador de Conselleria de Educación aunque apunta que la nueva orden reguladora del funcionamiento de las escuelas de idiomas es lesiva con las condiciones del profesorado y tendrá una incidencia negativa sobre la calidad de la enseñanza".

A este respecto lamenta el incremento de ratios a un mínimo de una veintena de alumnos por aula. "Esa cantidad debería de ser la máxima y no la mínima, como ha establecido la administración", replica el sindicato, que insiste en la necesidad de mantener unos parámetros básicos de calidad.

La central sindical ha propuesto, además, dos medidas que Conselleria ha aceptado, señala la entidad en un comunicado. La primera consiste en que, a petición del departamento, un alumno que ha aprobado durante todo el curso con buenas notas pueda recibir la certificación aunque haya suspendido la prueba específica. "No es justo que un estudiante de cuarto apruebe con ocho al final de curso y que, por un mal día, no pase el examen de certificación y no obtenga el B-1", señala CSI·F.

Del mismo modo, los alumnos que hayan aprobado inglés en Bachillerato no necesitarán superar la prueba homologada de A-2 para obtener esa acreditación. "El mismo profesor que les ha aprobado durante el curso les corrige esa prueba. Resulta una duplicidad de trabajo que no tiene sentido", señala CSI·F, que asegura que ha logrado en mesa el compromiso de eliminar el citado examen de homologación una vez se desarrolle la orden.

Por su parte, la Federació d'Ensenyament de CCOO (

Fe ccoo pv) ha criticado que el nuevo reglamento de organización y funcionamiento de las Escuelas Oficiales de Idiomas "aumentará la carga lectiva del profesorado".

Este sindicato apunta que la Conselleria ha recogido parte de las aportaciones de la

Fe ccoo pv, especialmente en cuanto a la no obligatoriedad para el profesorado de pasar de 4 a 5 grupos de docencia curricular. Esta medida estaba contenida en el borrador de Orden y suponía un aumento del 25% de la carga de trabajo del profesorado. CCOO "celebra su retirada y la posibilidad de que cada escuela y en cada idioma pueda elegir la estructura de horarios ofrecida al alumnado".

La organización no comparte, por contra, "el aumento de horas lectivas para el personal con cargos unipersonales que contempla esta misma orden".

RECORTES

La federación considera que "no hay ninguna razón pedagógica que sustente este cambio" y entiende que "se están implantando en reglamentos recortes que deberían ser temporales".

En la Mesa,

Fe ccoo pv también ha pedido la retirada del establecimiento de unas ratios máximas que coinciden con las impuestas por el Real Decreto de recortes. Esas ratios "deberían ser puramente coyunturales y temporales y no quedar fijadas en un reglamento de funcionamiento que pretende perdurar".