El Ayuntamiento de Pamplona ha preparado para los sábados de junio cinco visitas guiadas teatralizadas por las murallas de la ciudad. El ingeniero Próspero de Verboom, un soldado de infantería y uno de los portaleros de las murallas, todos ellos personajes encarnados por el actor Ion Iraizoz, esperarán al visitante en distintos puntos del recorrido para ponerle en situación de cómo era la vida diaria y las anécdotas de quienes desarrollaban su actividad en las proximidades de las fortificaciones de la ciudad.

Las cinco visitas, de una hora aproximada de duración, tendrán lugar a las 19.30 horas a un precio de 5 euros por persona (2 euro para público infantil menor de 12 años).

La venta de entradas se realizará en el Centro de Interpretación de las Fortificaciones, de martes a domingo de 11 a 14 horas y de 17 a 20 horas. También cabe reservar plaza en el teléfono 948 211554 o en el correo electrónico visitamurallaspamplona@gmail.com. El número máximo de plazas por grupo es de 35.

El recorrido llevará desde el Centro de Interpretación de las Fortificaciones (calle Arrieta, esquina calle Aralar), hasta el Portal de Francia pasando por la plaza Santa María la Real, la Ronda Barbazana y el Baluarte del Redín.

Esta actividades es una más de las iniciadas por el Consistorio para poner en valor las fortificaciones de la ciudad tras el proceso de rehabilitación, y se enmarca en FORTIUS. Este proyecto es un trabajo transfronterizo conjunto entre Pamplona-Bayona, subvencionado por la Unión Europea a través de Programa Operativo Territorial España-Francia-Andorra (POCTEFA), que se gestiona en la Comunidad de Trabajo de los Pirineos (CTP).

Historia encarnada en personajes

El libreto recorre distintas profesiones y situaciones vinculadas a la fortificación. Desde la historia de un constructor ya en declive, obsesionado por la mejora de las defensas abaluartadas, que vive recluido en el Fortín de San Bartolomé, pasando por la guardia de un soldado del siglo XVIII que se las da de gran guerrero en una fortaleza por la que no teme, hasta desembocar en el portalero fanfarrón y un poco malencarado que se extralimita en sus funciones, el turista y el visitante podrán ponerse en situación.

Entre medio de las escenas teatrales, las guías irán desgranando datos sobre la ciudad desde su fundación por Pompeyo hasta la etapa medieval; la historia de los burgos y sus guerras; las explicaciones sobre edificios como el Palacio Arzobispal o la Catedral y, en definitiva, la trama de hechos de los que las murallas han sido testigos y que configuran la historia de Pamplona.