Decenas de personas afectados por la compra de preferentes y deuda subordinada de Bankia han protestado a las puertas de su sede de Valencia contra su conversión en "accionistas forzosos" de la entidad, con los títulos de la ampliación de capital que se efectúa este jueves.

Ataviados con carteles en los que podía leerse "basta ya de los abusos de la banca" o "no queremos ser accionistas forzosos de Bankia", los asistentes, convocados por la asociación Adicae en el marco de su campaña de protestas 'Toque a la banca', han mostrado su "indignación" con gritos de "ladrones" y "chorizos" dirigidos a los responsables de la entidad.

La coordinadora de Adicae en la Comunitat Valenciana, Lorena García, ha lamentado que las personas que adquirieron preferentes o deuda subordinada "pensando que era plazo fijo" ahora se han convertido en accionistas, con una quita sobre su inversión, y ha advertido de que sus pérdidas "pueden ser mayores" en función de la evolución del valor de estos títulos en la Bolsa.

Ha detallado que la asociación ha presentado demandas colectivas para que se anulen las compras iniciales de estos productos de inversión vendidos "a personas ahorradoras con un perfil sin riesgo, que no tendrían que estar metidas en este follón".

El perfil de los titulares es, según ha explicado, de personas de unos 60 años con un ahorro medio de 20.000 o 30.000 euros, "normalmente el ahorro de toda la vida, que confiaban en su banco de toda la vida y eso les ha llevado ahora a verse atrapados en acciones forzosas". Asimismo, ha instado a la movilización "como una forma de presión más a los bancos y a los poderes".

En la concentración, que no había sido comunicada como en anteriores ocasiones por no ser "multitudinaria" —ha indicado García—, ha estado vigilada por una docena de agentes, que han identificado a algunos de los asistentes.

Los ahorros "de toda la vida"

Entre los manifestantes, Ángel ha comentado a los medios que le "engañaron, estafaron y robaron" con un plazo fijo en el que había metido el dinero de la liquidación que recibió de su empresa, que le aconsejaron metiera "en otro sitio que me iba a dar más rendimiento". "A los 6 meses fui a sacar el dinero y no me dejaron; la directora me llamó un día y me dijo: o paso todo esto a acciones o te quedas sin dinero".

Por su parte, María también ha mostrado su "indignación" porque destinó sus ahorros "de toda la vida" a preferentes en 2002 y a subordinada en 1999, mientras que José ha señalado que su mujer y él depositaron 130.000 euros en este tipo de productos.