La reunión entre el lehendakari, Iñigo Urkullu, y los partidos políticos vascos se ha saldado con un aparente acercamiento entre las posiciones del PNV y el PSE-EE, formación que, pese a coincidir con el resto de la oposición en las críticas a la falta de propuestas "concretas" por parte del Ejecutivo, se ha mostrado "dispuesta" a tratar de acordar una reforma fiscal para el mes de junio.

Por el contrario, EH Bildu, PP y UPyD han censurado la falta de "rumbo", la "incapacidad" y la "parálisis" del Gobierno. El lehendakari y los líderes del PNV, EH-Bildu, PSE-EE, PP y UPyD han permanecido reunidos durante más de tres horas, en un encuentro en el que han debatido sobre cuestiones como las posibles reformas tributarias, la lucha contra el fraude fiscal o medidas de reactivación económica y creación de empleo.

Al término del encuentro, los participantes han discrepado sobre el alcance de los acuerdos alcanzados. Desde la oposición, se ha censurado la falta de propuestas "concretas" por parte del Gobierno vasco, aunque mientras que EH Bildu, el PP y UPyD se han mostrado muy críticos con el lehendakari, los reproches del PSE se han centrado en la ausencia de propuestas específicas y se ha destacado su "disposición" para tratar de lograr un acuerdo sobre reformas fiscales y lucha contra el fraude para el mes de junio.

El Gobierno vasco ha expresado su "satisfacción" por lo que ha calificado de un "primer paso" para tratar de lograr pactos en cuestiones como la modificación del sistema tributario o la 'puesta en marcha de medidas de reactivación económica.

El PNV, por su parte, se ha mostrado "moderadamente optimista" respecto a la posibilidad de encauzar vías de entendimiento con los partidos de la oposición y ha afirmado que lo expuesto por los socialistas tras la reunión "refleja mejor" lo ocurrido durante la misma que lo relatado por los otros partidos. El portavoz del Gobierno vasco, Josu Erkoreka, ha mostrado su "satisfacción" por el hecho de que los partidos han "compartido" el "procedimiento y el calendario" planteado por Urkullu para afrontar cuestiones como la reforma fiscal y el refuerzo de la lucha contra el fraude tributario.

Tal y como ha explicado, el objetivo es que el acuerdo en torno a este tema pueda alcanzarse para junio, de forma que haya tiempo para la tramitación de las reformas oportunas antes de fin de año. Respecto a si considera que se ha producido un acercamiento con el PSE, Erkoreka ha destacado que el objetivo del Gobierno es "reconducir las diferencias" que puedan existir con todos los partidos.