El Tesoro Público ha colocado este martes 3.510 millones de euros en letras a tres y nueve meses -algo por encima de lo previsto- prácticamente al mismo interés que un mes antes, aunque ha elevado la rentabilidad de las de menor plazo.

De los 3.510 millones adjudicados este martes, tan sólo 891 han salido a tres meses, con una rentabilidad del 0,353 %, superior a la aplicada en abril (0,15%) y la más alta desde febrero, y otros 2.619 a nueve meses con un interés del 0,81 %, el más bajo desde que el Tesoro emite esta denominación, en enero de este año.

La ratio de cobertura, que es la proporción entre la demanda de las entidades y el importe finalmente adjudicado, ha sido en esta ocasión muy elevada, de 2,7 veces, ya que las solicitudes de las entidades han alcanzado 9.490 millones de euros.

La emisión no ha despertado expectación alguna entre los inversores, ya que se trataba de plazos muy cortos, al contrario de lo que ocurrirá el próximo jueves, cuando el Tesoro espera conseguir entre 3.000 y 4.000 millones de euros en bonos con vencimiento en 2016 y 2018 y obligaciones a 2026.

Así, en el mercado secundario la prima de riesgo de España apenas sufría cambios tras la puja y perdía un punto básico, hasta 282.

Además, España ha captado ya en lo que va de año aproximadamente el 55% de sus necesidades de liquidez para todo el año, según indicó este lunes el ministro de Economía, Luis de Guindos.

Por ello, indicó de Guindos, a partir de ahora las emisiones del Tesoro ya no tendrán que ser del tamaño realizado hasta ahora.

El mercado de renta variable permanecía ajeno a la subasta y el principal indicador de la bolsa española, el IBEX 35, perdía a esta hora un 0,74%, en una jornada de escaso volumen y tímida recogida de beneficios, tal y como apunta el departamento de análisis de Bankinter.