Restaurantes con mucho arte

Arte en las paredes y arte en la mesa, o casi. Muchos de los grandes museos del mundo albergan magníficos restaurantes. En España, muchos museos tienen restaurante que están a la altura. Creatividad a uno y otro lado, antes y después de la visita.

El más conocido de los restaurantes de museo es el Bistró Guggenheim Bilbao. Fue, en 2000, uno de los pioneros en fusionar arte y gastronomía. Es una propuesta informal, pero al mismo tiempo selecta y llena de personalidad. Un espacio vanguardista e innovador donde los toques de alta gastronomía son la nota distintiva.

Nerua es la otra propuesta gastronómica del Guggenheim que conduce Josean Martínez Alija. Ubicada en el corazón del Museo, junto a una obra de Richard Serra, apuesta por la cocina revolucionaria e innovadora.

También en Bilbao, el Museo de Bellas Artes da espacio al restaurante Arbolagaña. El chef es Aitor Basabe y en su cocina destacan los pescados elaborados con técnicas modernas, las carnes de caza, la torrija de bacalao, el arroz meloso de trufa y cebollino o el arroz con leche con crema de yema.

En Madrid, en pleno triángulo del arte, en el Paseo del Prado encontramos el restaurante Paradis Thyssen, en el Museo Thyssen. Se trata de un restaurante que lleva once años funcionando y que sólo abre en el horario del museo. En verano, abre El Mirador del Museo, situado en el ático, con una extensa y cuidada carta de cavas y vinos para disfrutar de una agradable velada.

También en Madrid, el Museo del Traje no ha olvidado la gastronomía. De la mano del Café de Oriente, y c on vistas a los espectaculares jardines y fuentes, se ubica el Restaurante Gourmet del Museo del Traje. La carta ofrece una cocina vasca actualizada por el chef Roberto Hierro. Presume de una excelente carta de vinos con referencias nacionales e internacionales, que dirige el sumiller Valerio Carrera.

Oleum es el restaurante del Museo Nacional de Arte Contemporáneo de Barcelona (MNAC). Cocina mediterránea actualizada, basada en la utilización de productos de primera calidad. Oleum, que ofrece unas excepcionales vistas sobre Barcelona, conserva la decoración original, que se ha actualizado y complementado.

En el Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) el restaurante es La Sucursal. Aquí se combina a la perfección la vanguardia del centro de arte con la creatividad y modernidad de sus platos.

Fuente: Guía Repsol. Rutas, mapas, restaurantes … ¡Planifica con nosotros tu viaje!