La excandidata presidencial francesa Ségolène Royal consideró este lunes que durante el primer año de mandato del presidente François Hollande habría sido necesario actuar "con mucha más rapidez" y dar más confianza a la población.

"Se tiene la sensación de que se ha perdido el tiempo", señaló la actual vicepresidenta de la Banca Pública de Inversión (BPI) en una entrevista concedida al diario Le Monde.

A su juicio, la aprobación del proyecto de ley sobre el matrimonio y la adopción por parejas del mismo sexo "debería haberse hecho el verano pasado", al igual que la reforma de la descentralización, mientras que medidas como los empleos del futuro, aunque positivas, "no son suficientes".

Royal subrayó que "hace falta expresar una estrategia global y prioridades", algo que pasa por insuflar confianza a los ciudadanos con señales fiscales, y también por aportar perspectivas.

Entre las cosas que han fallado en este primer año desde la victoria electoral se encuentran, según la excandidata presidencial, la "opacidad" en ciertas instancias de control, o el no haber aplicado todavía la no acumulación de mandatos, lo que no ha contribuido a mejorar la relación ciudadana con la autoridad.

"A falta de una ganancia inmediata de poder adquisitivo, muy difícil en periodo de crisis, se puede al menos esperar ganar en bienestar y democracia", apuntó la expareja del presidente, para quien la erosión registrada en la confianza hacia el Ejecutivo no se explica solo por la falta de resultados en materia de empleo.

En la entrevista, Royal reconoció que Hollande ha sido "muy reactivo y valiente" en asuntos de transparencia, pero consideró que ha llegado la hora de realizar algún cambio en el gabinete.

"No me corresponde hablar en su lugar, pero por principio creo que es necesario estar siempre en movimiento, sobre todo cuando se espera un nuevo impulso. Y, además, no es un secreto para nadie que hay ámbitos donde la reestructuración es necesaria, como por ejemplo la vasta galaxia de Bercy (sede del Ministerio de Economía)", concluyó.

Para quienes pudieran deducir de sus críticas una voluntad de entrar en el Gobierno, la antigua candidata, que acaba de publicar el libro Cette belle idée du courage, zanjó las dudas asegurando que en este momento no es su prioridad.

"He emprendido grandes obras en mi región laboratorio, y las quiero llevar a cabo. Es una concepción de la moral de la acción. Y quiero garantizar que la BPI va por el buen camino. Y de todas formas, seré candidata a mi sucesión en la cabeza del Consejo Regional de Poitou-Charentes en las próximas elecciones regionales", señaló.