El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha ordenado la busca y captura internacional de dos ciudadanos chinos imputados en el marco de la trama que investiga  la red china de blanqueo de capitales desarticulada con la operación Emperador, según fuentes jurídicas.

Se trata de Kai Xu, a la que se imputa una actividad directiva-organizativa directamente relacionada con el blanqueo en el seno de la organización criminal, y su marido, a los que el magistrado instructor había dejado en libertad con la obligatoriedad de comparecer todos los días en la Audiencia Nacional.

La orden se ha dictado después de que el juzgado comprobara que Xu y su esposo no acudieron a firmar como debían el pasado fin de semana. Tras una ausencia de 48 horas, el juez ha ordenado que se les localice y se proceda a su detención.

Según han apuntado las citadas fuentes, la policía se encuentra recabando pruebas y analizando el material incautado a la trama, lo que hubiera permitido un posible reingreso en prisión de estos dos ciudadanos chinos, como ya sucediera en el caso del presunto líder de la red, Gao Ping, y su mujer, Lizhen Yang. El regreso a prisión de estos, alertó previsiblemente al matrimonio huido.

La salida de la cárcel de la cúpula de la trama Emperador se produjo después de que sus defensas solicitaran la medida en aplicación de un auto dictado por la Sección Tercera de la Sala de lo Penal en el que se acordaba la excarcelación del contable de la red, Kai Yang, por haberse sobrepasado ilegalmente el plazo de detención de 72 horas. Además de Gao Ping, el juez ordenó entonces la excarcelación de su esposa; el presunto líder de la trama de extorsión, Haibo Li; Ying Quiaoya, Dinghua Ying, Ramón Antonio Aponte Alexander, Jingjie Ying, Augusto Edwin Su Hesmhant, Jianwei Pang, Xiaoshuang Zhu, Qibao Guo y Qiufen Wang.

Estas 12 libertades se sumaban a las que el tribunal concedió tanto a Yang como a otros tres arrestados, que alegaron en sus recursos que el juez instructor prorrogó ilegalmente su detención. Se trata de Wei Lin, lugarteniente de Gao Ping; Yongping Xia y Lingzhi Hu Zoutfq.

La aparición de nuevas pruebas sustentó en abril el reingreso en prisión de una decena de imputados y ahora han llevado a que la Sección Tercera de lo Penal, que preside Alfonso Guevara, justifique en un auto la decisión adoptada por Fernando Andreu de ordenar de nuevo para Haibo Li su ingreso en prisión provisional.

La Sala recuerda que esa nueva prueba consiste fundamentalmente en lo declarado por una serie de testigos que "le involucran directamente en las funciones de dirección de la facción de la banda dedicada al ejercicio violento de coacciones previas y venganzas posteriores". Por ello, el tribunal entiende que son pruebas "cuya indemnidad corre serio peligro de seguir en libertad la persona a la que afecta", no sólo por la posible obstrucción a la justicia, sino  por "la preservación de los testigos".

Tal y como indicaba Andreu en el auto de prisión, que ahora ratifica la Sala, "la testifical practicada viene a situar a Haibo Li como la persona a la que acuden los dirigentes de la organización para utilizar la intimidación o la violencia si es necesaria para la consecución de sus fines ilícitos". Según han informado a Efe fuentes jurídicas, la encarcelación de Haibo Li también se basa en el análisis de documentación incautada en registros.

Estos nuevos indicios, que se investigan bajo secreto, se están empezando a recabar gracias a la traducción del contenido de ordenadores, documentos y libretas incautados en los registros y acrecentan el riesgo de fuga de este y otros imputados.

A Haibo Li se le imputan once delitos: pertenencia a organización criminal, blanqueo, falsificación documental, contra la Hacienda Pública, amenazas, coacciones, extorsión, delitos contra los derechos de los trabajadores, contrabando, cohecho y contra la propiedad intelectual e industrial.