Forenses dicen que no hubo forcejeo entre la víctima y acusado de Mompía, que hizo un disparo por detrás

La defensa pide que, en caso de que el jurado le declare culpable, la pena sea de dos años de cárcel por un delito de homicidio imprudente
Juicio
Juicio
EUROPA PRESS
Juicio

Los forenses han asegurado que no hubo ningún forcejeo previo entre el acusado de asesinar a otro hombre en octubre de 2011 en Mompía y la víctima, que recibió cinco tiros, uno de ellos "por detrás". Así lo han señalado este miércoles en el juicio que se celebra en la Audiencia de Cantabria, donde han asegurado que el cadáver no presentaba "ninguna lesión" que indicase "lucha o defensa" entre ambos.

Además, en la tercera sesión del juicio, la defensa ha modificado las conclusiones previas. Y es que aunque continúa pidiendo la libre absolución de Rubén H.P. al entender que no cometió ningún delito o falta, solicita que, en el que caso de que sea declarado culpable, se le imponga una pena de tres años de cárcel, dos por un delito de homicidio por imprudencia grave y uno por tenencia ilícita de armas.

Según los forenses, el acusado —conocido como 'Carrillo' y para el que el fiscal pide un total de 20 años de prisión, uno menos que la acusación particular— disparó a la víctima en cinco ocasiones, una de ellas por la espalda, que le provocó una herida en el brazo izquierdo a la altura de la axila.

Además, tres de los disparos, los que le impactaron en la zona izquierda del pecho, fueron "seguidos" y se efectuaron a menos de medio metro de distancia, causándole lesiones cardiacas y pulmonares, así como una importante pérdida de sangre que le provocó la muerte. La quinta bala impactó en un dedo de la mano derecha.

Todos los disparos se realizaron a una distancia de entre medio metro y metro y medio, y solo tres (dos del tórax y la del dedo) tenían orificio de salida. La otra bala que impactó en el pecho recorrió parte del organismo, hasta quedar alojada en el hígado, según han detallado los forenses.

Movimiento sí,

Pero no forcejeo

Aunque han señalado que es "previsible" que la víctima "estuviese en movimiento", han asegurado que no mantuvo ningún forcejeo con el agresor antes de los disparos, ya que el cadáver no presentaba "ninguna lesión" que indicase "lucha o defensa" entre ambos.

Lo que sí hallaron en el cuerpo del fallecido fueron signos de consumo de alcohol (1,60 gramos en sangre y 1,96 en la orina) y de cocaína (2,90 mg por litro de orina).

ARMA

Por otro lado, los agentes de la Guardia Civil que realizaron el informe de Balística han confirmado que los seis casquillos y los seis proyectiles que analizaron "son positivos entre sí" y fueron disparados con una pistola de 9 milímetros, una arma corta de "uso restringido" y para la que se necesita licencia.

Además, estos expertos en armamento cotejaron los antecedentes de la pistola, que coincidía con "otra que fue utilizada en un caso por delito de daños" que, en aquellos momentos, instruía otro juzgado de Santander. "Es cien por ciento fiable que se trata del mismo arma", han sentenciado.

Modificación conclusiones

En el juicio, la defensa insiste que no se declare culpable a Rubén H.P. por los eximentes de intoxicación plena, legítima defensa putativa y miedo insuperable.

Así, aunque sigue pidiendo la libre absolución, ha solicitado que, en caso contrario, se apliquen las atenuantes de confesión, reparación del daño, miedo insuperable, actuar bajo los efectos del alcohol y demás sustancias, entre otras, y se le imponga una condena de dos años por un delito de homicidio por imprudencia grave y uno por tenencia ilícita de armas.

Además, en el supuesto de que se le declare culpable, la defensa pide que la indemnización a pagar sea de 20.000 euros para los tres hijos de la víctima.

Mientras, la Fiscalía mantiene su petición de 17 años por un delito de asesinato y otros tres por tenencia ilícita de armas con el agravante de reincidencia, así como una indemnización de 145.000 euros para la pareja sentimental del fallecido; 62.000 euros para cada uno de sus tres hijos menores y 6.000 para el padre.

Por su parte, la acusación particular considera que se trata de un delito de asesinato con alevosía y otro de tenencia ilícita de armas con agravante también de reincidencia, por los que pide 18 y 3 años de cárcel, así como la prohibición de acercarse a los familiares del fallecido a menos de 300 metros durante 25 años.

Asimismo, pide para la mujer una indemnización de 150.000 euros, 65.000 para cada uno de los tres hijos, 10.000 para el padre de la víctima, y 12.000 para cada uno de los seis hermanos, así como el abono de los gastos de las honras fúnebres, que ascienden a 3.500 euros.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento