El Juzgado de 1ª Instancia e Instrucción de Pola de Lena ha notificado este lunes a tres hombres que fueron detenidos durante una protesta minera en la localidad que sigue adelante la investigación sobre su presunta implicación en las movilizaciones.

A. G. M. , J. A. O. L. y D. M. P. podrían enfrentarse a una acusación por presuntos delitos de atentado contra la autoridad y desórdenes públicos tras ser detenidos en el entorno donde se produjo una acalorada disputa entre agentes de la Guardia Civil y participantes en una barricada. El auto de la jueza enumera la presencia de hasta 300 personas en el lugar donde se produjeron los hechos.

La reyerta que se investiga, según consta en el escrito de la titular del Juzgado de Lena, se remonta al 27 de junio de 2012. La Dirección General de la Guardia Civil interpuso una denuncia después de que agentes del Instituto Armado, que estaban custodiando un convoy de camiones desde Caldas de Luna hasta Olloniego, observaran a su paso por Pola de Lena que "unas veinte personas encapuchadas habían cortado la vía empleando para ello neumáticos, a los que prendieron fuego con gasolina y petardos".

El auto da más datos sobre lo ocurrido: "En una carretera situada al margen de la A-66 y que discurre a un nivel más elevado que la autopista, se encontraban unas veinte personas, igualmente encapuchadas y portando tubos cilíndricos para lanzamiento de cohetes. Igualmente al margen izquierdo, a la altura de un centro comercial y de la marquesina de la estación de autobuses se encontraban unas 200 personas, así mismo, sobre el puente o paso peatonal que cruza la autopista, se encontraban otras cincuenta personas".

Amenazas con cohetes

El auto relata cómo los agentes de la Guardia Civil se dispusieron a limpiar el carril derecho de la calzada después de que la circulación permaneciera cortada durante una hora y, siempre según el escrito del Juzgado de Lena, "desde la carretera del margen derecho, un encapuchado le apuntó con uno de los tubos lanzacohetes a la vez que otro introducía un cohete por la parte posterior, amenazando a los Guardias Civiles en varias ocasiones, con frases tales como "os quitáis de ahí o sino os disparamos", cosa que finalmente hicieron, cayendo el volador encendido a sus pies, girando en el suelo hasta que explotó".

"Acto seguido huyeron del lugar tomando dirección a un grupo de casas que se encontraban en las proximidades, desde donde dispararon otros dos cohetes hacia donde se encontraban los agentes y demás personas atrapadas en el corte de carretera", continúa el escrito de la Jueza.

Al comenzar a circular los coches por el carril que había estado cortado por la barricada, "los allí presentes se alteraron aún más, empezando a lanzar botellas de vidrio a los Guardias Civiles en un primer momento y posteriormente también a los vehículos que sobrepasaban la barricada".

Uno de los vehículos era "un autobús que llevaba a sesenta niños". Los agentes volvieron a cortar el tráfico y se metieron en el coche oficial, donde "recibieron multitud de botellazos y, al temer por su integridad física, tuvieron que retroceder marcha atrás". La titular del Juzgado estima que "obran indicios" de que A. G. M. , J. A. O. L. y D. M. P "participaron en el hostigamiento con las botellas a los agentes y demás personas que se encontraban en el lugar".

La titular del Juzgado ha enviado el auto al Ministerio Fiscal y las acusaciones particulares personadas. Los tres detenidos habían prestado declaración el día 24 de julio y fueron puestos en libertad con cargos. Ninguno de los tres es minero.