Agentes de la Policía Nacional han detenido a un hombre, empleado de un bar, que simuló haber sufrido el robo de la caja —un total de 65 euros— cuando en realidad presuntamente se gastó el dinero en una máquina tragaperras, según ha informado Jefatura en un comunicado.

Éste es una de las ocho personas detenidas últimamente por la Policía como presuntas autoras de un delito de simulación de delito, tras fingir ser víctima de delitos, generalmente robos con violencia, con el fin de cobrar la indemnización del seguro en alguno de los casos. A uno de ellos, además se le imputa un delito de estafa. Las detenciones han tenido lugar en Valencia, Alzira, Gandia, Ontinyent y Torrent.

En la mayoría de las ocasiones, las denuncias presentadas eran por robos con violencia, generalmente teléfonos móviles de última generación, pero también de dinero en efectivo.

En uno de los casos, una mujer denunció haber sido víctima de un robo con violencia, y dijo que un hombre le había dado un fuerte tirón y le había arrebatado el teléfono móvil, valorado en 600 euros. Los agentes comprobaron posteriormente que en lo que en realidad ocurrió es que lo había perdido en el interior de una discoteca.

En Ontinyent, un hombre denunció haber sido víctima de un robo con violencia de 4.400 euros en efectivo. Los investigadores averiguaron que se había dejado olvidado un bolso con esa cantidad de dinero en el interior de su coche, a la vez que sin cerrar, por lo que alguien abrió la puerta y se lo quitó.

En Gandia, el empleado de un bar denunció haber sido víctima de un robo con violencia por parte de tres hombres con cuchillos, que entraron en el mismo y le sustrajeron 65 euros de la caja registradora. Los policías averiguaron que el denunciante había cogido los 65 euros de la caja registradora y se los había gastado en la máquina tragaperras del bar, y al no poder reponerlo, fingió el robo para no ser despedido.

Los detenidos, todos sin antecedentes policiales a excepción de uno de ellos, quedaron en libertad después de prestar declaración en dependencias policiales, advertidos de la obligación de presentarse en el juzgado cuando fuesen requeridos.