La nueva fuente de la plaza Paraíso de Zaragoza ha iniciado su funcionamiento habitual, tras su construcción dentro de las obras del tranvía. Se emplaza en un espacio que ha cambiado su imagen, incluyendo un paso peatonal y ciclista que une el bulevar de Gran Vía y el paseo de la Independencia.

Además, bajo esta zona, se ha llevado a cabo una "importante labor de renovación de infraestructuras", que se efectuó en todo el trazado del tranvía en la primera fase de obras, ha informado el Ayuntamiento de Zaragoza en un comunicado.

La nueva fuente de Paraíso, en forma de 'L', está diseñada para crear una cortina de agua para aislar a los peatones del tráfico "y crear un espacio amable de descanso". No obstante, la altura de los géisers no supera los cuatro metros, para que desde el interior de la glorieta permanezcan visibles edificios emblemáticos de la zona, como el Paraninfo de la Universidad.

En total, hay 86 surtidores. La parte más larga de la 'L' tiene tres filas, donde el agua se escalona para dar un efecto de volumen, mientras que la más corta cuenta con una fila. Asimismo, hay tres circuitos que permiten programar distintos movimientos de la fuente, variando la iluminación y la altura de los géisers.

Activación a distancia

Los programas predefinidos se pueden activar a distancia y la iluminación consiste en coronas de leds RGB que rodean cada uno de los surtidores. Al contar con rojo, verde y azul se pueden combinar para lograr distintos tonos.

Además, se ha creado una zona de resguardo de dos metros para que el agua no salpique a los peatones y la fuente queda delimitada por un bordillo de granito.

También dispone de un circuito de reciclado y clorado del agua, mientras que el sistema de cableado y bombas está oculto a la vista. En el vaso, se ha colocado un suelo técnico que queda por encima de las tuberías.