La consejería de Fomento del Principado de Asturias está actualmente estudiando diferentes posibilidades técnicas para dar la mejor solución al problema de conexión de la futura AS-III con las gasolineras de Riaño (Langreo) y de Fonciello (Siero), siempre dentro de la normativa de trazado y de seguridad vial vigentes. Las soluciones que se consideren viables "serán incluidas en los oportunos expedientes de modificación de los respectivos contratos de obras".

Así consta en una respuesta de la consejera de Fomento, Ordenación del Territorio y Medio Ambiente, Belén Fernández, al diputado del PP Fernando Goñi. El 'popular' preguntó al Principado si va a buscarse una solución a esas dos gasolineras "que llevan padeciendo 60 meses de obras" y que ahora "se van a ver sin acceso a la autovía". El PP sostiene que si pierden el acceso directo a la autovía se verán abocadas al cierre definitivo, provocando la pérdida de diez puestos de trabajo.

En la respuesta, consultada por Europa Press, Belén Fernández indica que se trata de dos gasolineras que contaban con accesos directos a la antigua carretera AS-17 y presentan "problemáticas diferentes".

Además, señala que el proyecto original de licitación de las obras "no contempla accesos directos desde la futura autovía a las dos gasolineras afectadas, sino desde vías de servicio diseñadas a los efectos, como en tantas gasolineras existentes en la red de carreteras autonómicas del Estado".