Stephen Magsig, el retratista de la "belleza silenciosa" de los escenarios diarios de la ciudad

  • El pintor aúna la tradición paisajística estadounidense con el hiperrealismo, un estilo también típico del país.
  • Hace "retratos de espacios olvidados y descuidados".
  • Una muestra reúne los óleos más recientes del autor, centrados en portales, negocios y construcciones de Nueva York.
El pintor Stephen Magsign reproduce al óleo un portal de la calle Duane, en Nueva York
El pintor Stephen Magsign reproduce al óleo un portal de la calle Duane, en Nueva York
Stephen Magsig - George Billis Gallery
El pintor Stephen Magsign reproduce al óleo un portal de la calle Duane, en Nueva York

Con óleos de motivos urbanos e industriales Stephen Magsig continúa cultivando el tradicional género paisajístico estadounidense que también inspiró a Edward Hopper. El artista mantiene vivo el legado de los pintores que desde el siglo XIX reproducen parajes naturales o manifestaciones arquitectónicas como seña de identidad nacional y lo combina con el hiperrealismo, otro de los géneros más representativos del arte de los EE UU.

Stephen Magsig, en la galería George Billis de Nueva York hasta el 25 de mayo, es una selección de las pinturas más recientes del autor, que lleva años dedicado al exhaustivo retrato de Detroit, la ciudad en la que vive y trabaja: "Son documentos visuales de la belleza silenciosa en los escenarios diarios. Retratos de espacios olvidados y descuidados".

Pasados por alto por culpa del estrés cotidiano

La muestra sin embargo no se centra en los óleos de edificios y paisajes de decadencia industrial de la ciudad más grande del estado de Míchigan, sino en las obras que Magsig ha creado en sus recientes visitas a Nueva York. Maravillado por la variedad y la calidad arquitectónica de la ciudad, su colección de portales con cuidadas macetas, fachadas neoclásicas, negocios con grafitis y vistas del puente de Brooklyn y de Manhattan dominan sus creaciones del último año y exhiben un notable dominio de la luz que el autor disfruta combinando con las estructuras.

Viaja cada año a Nueva York para documentar rincones sin presencia humana —con frecuencia pasados por alto por culpa del estrés cotidiano de la gran ciudad— en los que siempre hay juegos de luces y sombras que reproduce como enfrentándose con gusto al desafío.

Magsig pinta sus óleos alla prima (a la primera, en italiano) aplicando capas húmedas sobre la pintura todavía húmeda, con pinceladas que aúnan la imprecisión de la atmósfera con el detalle fiel. "Aunque mi trabajo es figurativo estoy más interesado en la historia de la escena y en la plasticidad de la pintura que en crear una representación exacta del tema", dice en su declaración de intenciones.

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