El Colegio Oficial de Ópticos-optometristas de la Región de Murcia (COORM) ha recomendado, con motivo del Día Internacional del Libro, no abusar de la lectura en dispositivos electrónicos ya que puede provocar fatiga visual, según informaron fuentes de la institución en un comunicado.

El Colegio recuerda que las ventas de estos dispositivos electrónicos, como libros electrónicos, tabletas, portátiles y teléfonos inteligentes "se han disparado hasta convertirse en el regalo estrella".

La primera consecuencia de esta multiplicación de pantallas, indica, es que los patrones de lectura "están cambiando de manera radical". Según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en 2011, elaborado por la Federación de Gremios de Editores de España, el 52,5 por ciento de la población española de 14 años o más lee en formato digital, es decir, en las pantallas de ordenadores, teléfonos móviles, agendas electrónicas o 'e-readers'.

No obstante, según este barómetro, solo el 6,8 por ciento de la población afirma leer libros en este formato. Los españoles emplean los soportes digitales mayoritariamente para leer el periódico (34,3 por ciento) o para consultar webs, foros, redes sociales, añade el Colegio.

El COORM reconoce que la lectura electrónica "ofrece muchas ventajas respecto a la lectura tradicional, pero recuerda que si tras horas sentados frente a un libro sentimos cierto "cansancio" ocular, esta incomodad visual "aumenta con las pantallas de los dispositivos digitales".

Fatiga visual

En este sentido, el Colegio advierte que si se dedican muchas horas a una lectura intensiva, los ojos "se pueden resentir, pero más aún si utilizamos dispositivos como 'e-books', tabletas, iPhone o el ordenador, ya que estos "suelen situarse a distancias más alejadas de los ojos que los libros".

La presidenta del COORM, Ana Belén Almaida, recuerda que "aproximadamente un 75 por ciento de los usuarios de ordenador padecen el denominado Síndrome de Fatiga Visual".

Entre sus síntomas se incluyen molestias oculares como tensión, pesadez de ojos, picores, quemazón, necesidad de frotarse los párpados, somnolencia, escozor ocular y aumento del parpadeo. También conlleva trastornos visuales tales como dificultad al percibir los caracteres en las pantallas, visión borrosa al mirar de lejos y diplopía o visión doble.

Igualmente, supone síntomas extraoculares tales como cefaleas, vértigos y sensaciones de desasosiego y ansiedad, además de molestias en la nuca y la columna vertebral.

Luz indirecta

Desde una perspectiva visual, el Colegio remarca que los ordenadores, las tabletas y los teléfonos inteligentes son similares entre sí, ya que todos cuentan con pantallas que se iluminan. Esto supone un cierto inconveniente para los ojos del usuario, ya que, normalmente, mantener la mirada fija en una fuente de luz directa provoca fatiga visual.

Los 'e-book', por el contrario, utilizan tinta electrónica, lo que significa que sus pantallas no están iluminadas, sino que ofrecen una imagen que debe ser iluminada desde fuera, como ocurre con el papel. Por lo tanto, al igual que con un libro impreso, el nivel de luz ambiental resulta clave para una visión cómoda.

En cualquier caso, el COORM señala que la lectura de un libro electrónico, un ordenador o un libro en papel, independientemente de si la pantalla está retroiluminada o no, "provoca fatiga visual, por lo que es imprescindible realizar descansos de manera regular".

Decálogo para una correcta lectura electrónica

Para evitar estos problemas y mantener una correcta salud visual, el COORM recomienda tener en cuenta una serie de consejos, especialmente si utilizamos soportes electrónicos para la lectura, como hacer descansos cada cierto tiempo: como mínimo, una pausa de cinco minutos por cada hora de lectura.

Recuerda que los trastornos relacionados con el Síndrome de Fatiga Visual son provocados por trabajar reiteradamente a la misma distancia. Para descansar los músculos oculares, recomienda alternar la visión entre un objeto cercano y otro lejano cada veinte minutos mirando por la ventana, por ejemplo.

Recuerda que es necesario parpadear ya que, debido a la concentración, "solemos hacerlo mucho menos de lo normal". Si aún así se notan los ojos secos, también se puede recurrir a un colirio.

Aconseja igualmente ajustar el brillo y contraste de la pantalla para que esté en consonancia con la iluminación de la zona de trabajo. "Reducir la luz ambiental nos permitirá suavizar el brillo del monitor, mejorando así la visualización del texto", añade.

"Asegúrate de que tienes la luz apropiada, mejor si es natural, pero recuerda que el exceso de luz también puede ser perjudicial", explica el Colegio, que recomienda optar "mejor por una iluminación lateral para evitar los reflejos".

Si el monitor lo permite, el COORM señala que se debe aumentar la velocidad de refresco de la pantalla, y añade que una cifra de 70-75 Hz "ya se considera como una buena medida para reducir la fatiga visual".

Recomienda igualmente mantener el monitor del ordenador a unos 60 centímetros de distancia y ligeramente por debajo del nivel de los ojos. "Atención en el caso de los niños, ya que por su estatura pueden encontrar la pantalla demasiado alta". En el caso de los 'e-book', recomienda mantenerlos a unos 35 ó 40 centímetros de distancia de los ojos.

Dentro de lo posible, recomienda ajustar el tamaño de la letra, y no utilizar los medios electrónicos cuando se esté muy cansado. "No olvides someterte a una revisión visual anual, porque defectos no corregidos, incluso de pequeña magnitud, como hipermetropía, vista cansada o astigmatismo, así como disfunciones en la acomodación o la visión binocular, pueden contribuir a que aparezcan síntomas molestos derivados de las exigencias visuales en visión próxima".