El juez que investiga la tragedia del Madrid Arena ha rechazado modificar las medidas cautelares que se impusieron al organizador de la fiesta, Miguel Ángel Flores, quien no puede salir del país y tiene que acudir regularmente al juzgado, así como una nueva comparecencia del imputado.

En un auto, el titular del Juzgado de Instrucción número 51, Eduardo López Palop, rechaza ampliar estas medidas con el ingreso en prisión de Flores, como solicitó el colectivo Manos Limpias, y también reducirlas, como pidió la defensa del imputado.

El juez sostiene que las medidas actuales que pesan sobre Flores, consistentes en el pago de una fianza, la entrega del pasaporte, la prohibición de salir de España y la comparecencia dos veces al mes en el juzgado, "han sido hasta la fecha escrupulosamente cumplidas por el imputado, por lo que no ha lugar a la ampliación de las mismas, como solicita el sindicato Manos Limpias".

En este sentido recuerda que el ingreso en prisión provisional es "una situación excepcional" que "en ningún caso debe tener la condición de pena anticipada". "Las medidas adoptadas han acreditado su eficiencia, han sido cumplidas en todo caso por el imputado y no aparece razón alguna suficiente, a criterio de este Juzgado, ni para ampliarlas ni para suprimirlas", mantiene el auto.

López Palop desestima asimismo una nueva comparecencia de Miguel Ángel Flores, solicitada por Manos Limpias para la ampliación de las medidas cautelares.

El 20 de noviembre de 2012 Miguel Ángel Flores, gerente de la empresa Diviertt, declaró como imputado ante el juez, que le impuso la obligación de comparecer en el juzgado dos veces al mes. En su declaración, el empresario culpó al Ayuntamiento y a la Policía Municipal de la tragedia.

Un mes después, el 27 de diciembre, la Policía detuvo a Flores ante el "riesgo de que pueda fugarse", y al día siguiente quedó en libertad tras pagar una fianza de 200.000 euros.