Nuevas tecnologías más rápidas y baratas, como la impresión en tres dimensiones, diseños personalizados por el cliente para crear productos únicos y la concepción del hogar como un "refugio" en tiempos convulsos son algunas de las tendencias que pueden "revolucionar" el sector del hábitat de la Comunitat Valenciana.

Así se recoge en el 'Cuaderno de Tendencias del Hábitat 2013-2015', la tercera entrega de una guía que pretende ofrecer a las empresas de la Comunitat una herramienta para posicionarse mejor en el mercado y aumentar su competitividad. La publicación ha sido presentada en rueda de prensa por el conseller de Economía, Industria, Turismo y Empleo de la Generalitat Valenciana, Máximo Buch, el presidente de Aidima, Vicente Martínez Sancho, y Pepa Casado, del Observatorio de Tendencias del Hábitat.

Del estudio —en el que han colaborado los institutos Aidima, Aitex e ITC— se desprende que el complejo escenario económico ha traído consigo una importante caída del consumo de bienes relacionados con el hábitat, a la vez que ha convertido el hogar en un lugar "de refugio, de autorrealización, de creatividad y expresión de la individualidad de sus habitantes". Ante la crisis, el Observatorio recomienda a las firmas que "es más necesario que nunca que adapten su discurso para poder llegar a clientes que están perdiendo la fidelidad a la marca y que tienen cada vez menos poder adquisitivo para comprar".

Asimismo, y aunque el documento no recoge consejos específicos sobre precios, de él se desprende que el mercado está "muy polarizado" entre la gama más alta y la baja y es en el punto medio donde se produce la situación más complicada, ha explicado Pepa Casado.

En cuanto a las tendencias dominantes, la especialista ha detallado que se han detectado siete. La primera de ellas, bautizada como 'Antique Essence', recurre a la historia y a los cánones de la belleza clásica, que se vinculan con las clases más elevadas y con el lujo, lo que desemboca en un diseño elegante. Por su parte, la corriente 'From Abroad with Love' se centra en aspectos emocionales del producto, bien porque hacen referencia a lo cotidiano de cada país, de cada persona, o bien porque implica procesos de producción no industriales de tiradas más cortas y con más implicación de la personalidad del diseñador.

Los expertos también constatan las tendencias 'Beta House', que concibe la casa, en el panorama actual de incertidumbre, como uno de los pocos ámbitos estables y previsibles; y 'Let's get Smart', que subraya la importancia de los avances tecnológicos en el entorno doméstico y en el espacio urbano. En este punto, y sobre la incidencia en concreto de la impresión 3D, Casado ha señalado que cada vez hay tecnología "más barata, que hace posible la producción al momento y personalizada", lo que ya ha sido calificado por expertos como "la próxima revolución productiva".

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Mentación y supervivencia

Finalmente, se recogen las perspectivas 'My Own Playground', que aporta una visión positiva, en ocasiones un tanto infantil, del hogar y de todo lo que se sitúa en el marco de lo cotidiano; 'Material World', que apuesta por la experimentación industrial, sobre todo en lo referente a los materiales, pero también en los procesos productivos, y 'Survival Objects', que propone un diseño informal, que huye de la perfección y en ocasiones se presenta como un diseño de supervivencia, con la reutilización de materias primas o el uso de materiales biodegradables.

Por su parte, el conseller Máximo Buch ha subrayado la relevancia de esta iniciativa, puesto que "en un escenario complicado como el actual la predicción de tendencias resulta clave, sobre todo para las pymes".

Además, ha recordado el peso del sector del hábitat en la economía valenciana y ha citado datos como que el 86 por ciento de la cerámica que se exporta desde España sale desde la Comunitat, el 31 por ciento de textil-hogar y el 22 por ciento de mueble e iluminación.

En al misma línea, ha apuntado que durante el primer trimestre de este año se han creado 26.000 contratos en el sector industrial —un 6 por ciento más que en el mismo período de 2012— y la contratación indefinida industrial ha aumentado un 12 por ciento.