El tenista Rafa Nadal debuta este miércoles en el Masters de Montecarlo, donde se medirá al australiano Marinko Matosevic (nº 54 del mundo) que ha derrotado a Fernando Verdasco, con la perspectiva de un nuevo récord: nadie en la Era Open, la profesional, que se inició en 1968, ha levantado nueve trofeos del mismo torneo y, por lo tanto, nadie lo ha conseguido de forma consecutiva.

Hasta que termine el campeonato de Mónaco, el balear seguirá empatado con el argentino Guillermo Vilas, vencedor en ocho ocasiones en Buenos Aires (1973, 1974, 1975, 1976, 1977, 1977, 1979, 1982), como Nadal en Montecarlo (2005, 2006, 2007, 2008, 2009, 2010, 2011 y 2012).

Las estadísticas de Nadal validan, de sobra, un sobrenombre del que el manacorí siempre quiere huir, Rey de la Tierra. Posee el récord de partidos consecutivos ganando en arcilla, 81 entre 2006 y 2007; ha ganado 266 de los partidos que ha disputado en polvo de ladrillo por solo 20 derrotas, con el 93% de efectividad; y en su palamarés brillan 38 títulos en arcilla.

La extenista Vivi Ruano, ganadora de todos los Grand Slams en dobles y, en especial, seis Roland Garros sobre la tierra de París, explica por qué Rafa es, prácticamente, invencible. "Se ha criado en tierra. Es su superficie y luego, a lo largo de su carrera, ha ido adaptando su juego a otras superficies. Además de que tiene una fuerza mental que ningún otro tenista posee".

Al hablar de su juego, Vivi parece narrar cualquier partido de Nadal en tierra ya jugado: "Lo primero es que es zurdo y así logra ventaja sobre sus rivales, la mayoría diestros, porque su bola ataca el revés del contrincante. También, a diferencia de la pista rápida, sobre arcilla es complicado hacer tantos golpes ganadores y saques directos, así que es muy complicado desbordar a Rafa. Es muy sólido e imprime un ritmo muy alto al partido que pocos pueden seguir. Rafa pone a sus rivales a jugar todos los puntos".

El famoso top-spin, efecto que le imprime a la bola el número 5 del mundo, es fundamental. "A Nadal le gusta que la bola salte y bote muy alto. Que esté viva. De esta forma y, ya que la tierra es más lenta, le da tiempo a llegar a todas las bolas. Que el torneo sea a nivel del mar también le ayuda porque al haber mayor densidad de aire, la velocidad de la pelota se ralentiza", comenta Ruano.

La tierra es el hábitat natural de Rafa Nadal. Por su tenis y porque protege sus maltrechas rodillas. "Por supuesto. Las articulaciones sufren mucho menos en arcilla que en pista dura, donde se producen muchos más impactos y la mayoría de frenadas son en seco. En arcilla, puedes alcanzar la bola resbalando, en lo que Rafa es un especialista. Esta superficie le permite recuperar mejor y él es un defensor nato", comenta Vivi.

La doble plata olímpica en 2004 y 2008 subraya también el aspecto psicológico, destacando que "los jugadores no ven cómo ganarle. Muchos ya salen derrotados a los partidos".

Para Vivi, es el "favorito" para Montecarlo y para cualquier torneo de tierra: "Ha ganado con dolor en las rodillas, así que cuando no lo tenga... Yo creo que no está al 100 %, pero casi. En tierra, a Murray no lo veo suficientemente sólido para ganarle y Djokovic no está como los dos años anteriores. El único que le podría hacer algo de frente sería David Ferrer y no está en Mónaco".

Las 42 victorias consecutivas en el Principado le dan la razón a Vivi Ruano. Un récord total de 44-1. Rafa Nadal solo perdió en Montecarlo en 2003, en tercera ronda, contra el argentino Guillermo Coria, después de haber eliminado a Albert Costa, actual director deportivo de la Federación Española de Tenis. Solo tenía 16 años.