Varios miles de personas se han manifestado este sábado en San Sebastián para apoyar a los ocho jóvenes de Segi condenados por el Tribunal Supremo por pertenencia a banda armada, que también han participado en la marcha y han asegurado que va a "costar" encarcelarlos aunque para ello se emplee "la fuerza".

El presidente de Sortu, Hasier Arraiz, el diputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, y el alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, han marchado tras la pancarta que abría la protesta y que portaban los padres de los ocho jóvenes, cuya condena a seis años de prisión confirmó el lunes Tribunal Supremo, que ha absuelto a otros siete imputados en el mismo proceso.

Arraiz, Garitano e Izagirre han acompañado a los sentenciados, y al grupo de jóvenes que han estado junto a ellos con camisetas y globos naranjas, en una sentada que ha tenido lugar al final de la marcha en el Boulevard donostiarra, a la que también se han sumado otros dirigentes de Sortu como Joxean Agirre, Marian Beitialarrangoitia y Joseba Álvarez, y representantes de Aralar y Alternatiba.

Durante la protesta, convocada por el movimiento Eleak, se han coreado consignas a favor de los presos de ETA, de la amnistía y la juventud vasca.

Tras recorrer el centro de San Sebastián y llegar al Boulevard, donde se encuentra instalado un 'Aske Gunea' (Espacio libre) desde que se conoció el fallo judicial, con carpas y carteles de apoyo, han arreciado las proclamas por la independencia.

Allí, el portavoz de Eleak, Txerra Bolinaga, ha asegurado que, "a la violencia de los Estados (español y francés)" responderán "con resistencia civil pasiva" en defensa de sus "derechos".

"También con desobediencia e, incluso, con insumisión si hace falta, porque la lucha continúa y continuará hasta que se respeten todos los derechos de todas las personas de Euskal Herria", ha recalcado.

Uno de los condenados ha hablado por todos ellos y ha transmitido unas palabras de "ánimo" en nombre de Ekaitz de Ibero, uno de los siete absueltos por el Supremo, que tiene una condena pendiente por quemar un autobús y fue detenido en ese mismo lugar el pasado miércoles, en una actuación policial que derivó en incidentes.

Ha dicho a los manifestantes que son "un ejemplo de dignidad" y ha asegurado que gracias a ellos va a "costar" encarcelarlos, aunque para hacerlo llegue el Ejército o la Ertzaintza con las porras.

El martes, los ocho jóvenes de Segi condenados dijeron que no aceptaban la sentencia del Tribunal Supremo, cuyas copias rompieron en una comparecencia pública.