En un comunicado, la institución insular ha detallado que la mejora de la carretera se hace necesaria por el tránsito elevado que soporta. De hecho, cada día pasan 15.000 vehículos y el 7% de los cuales es tránsito pesando, según datos del año 2011.

Las obras han empezado esta semana en las cunetas de la carretera con los trabajos de reinstalación de cañerías de la red de aguas pluviales y drenaje. También se ejecutan las tareas para llenar las cunetas con un material filtrando para incrementar la seguridad de la vía. Para esta actuación, la carretera se ha estrechado en ambos sentidos de la circulación a la Ma-11, entre el punto kilométrico 6,00 y el 10,00.

La calzada se dotará de una capa de un rodamiento de árido porfírico y también se incrementará la seguridad de la vía para los motoristas. En la actualidad, las barreras de seguridad incumplen la normativa vigente y, además, hay tramos que no tienen esta protección.

Con este proyecto, toda la carretera tendrá barreras de seguridad y las que hay, metálicas, se sustituirán por barreras de hormigón. Durante la ejecución de las obras es posible que se produzcan retenciones de tránsito, por lo que la Dirección Insular de Carreteras recomienda a los conductores que tomen todas las precauciones necesarias.

En la intersección en Son Reus, en concreto, el Departamento de Urbanismo y Territorio planea otra actuación que consistirá en la construcción, en un futuro, de una rotonda para distribuir el tránsito de Son Reus y polígonos, proyecto que se redacta con la colaboración del Ayuntamiento de Palma.