Los afectados por las lluvias y las inundaciones en Extremadura tienen el mes de abril para pedir las primeras ayudas

Los afectados por las fuertes lluvias y las inundaciones de las últimas semanas en Extremadura tienen este mes de abril para solicitar al Gobierno de España las primeras ayudas acogiéndose al Real Decreto 307/2005 que palía situaciones de emergencia o naturaleza catastrófica.
Germán López Iglesias
Germán López Iglesias
EUROPA PRESS
Germán López Iglesias

Los afectados por las fuertes lluvias y las inundaciones de las últimas semanas en Extremadura tienen este mes de abril para solicitar al Gobierno de España las primeras ayudas acogiéndose al Real Decreto 307/2005 que palía situaciones de emergencia o naturaleza catastrófica.

Así lo ha anunciado, en una rueda de prensa en Badajoz, el delegado del Gobierno en Extremadura, Germán López Iglesias, quien ha concretado que esta normativa concede a los afectados subvenciones por los "defectos" que haya podido sufrir la primera vivienda o bien a los ayuntamientos por los "daños" en el mobiliario urbano o por la adquisición de maquinaria, para quitar barro o desaguar por ejemplo, de la que careciesen hasta ese momento por ser de menor tamaño.

A preguntas de los periodistas por las inundaciones registradas en la región, ha puntualizado que estas ayudas estatales se deben solicitar ante la Delegación del Gobierno en la comunidad extremeña y ha ofrecido para su tramitación el traslado de funcionarios a los municipios que cuenten con un elevado número de afectados, algo que ya han pedido, según le "consta", Mérida y Villanueva de la Serena.

Elaboración decreto "conjunto" de ayuda

Al mismo tiempo, López Iglesias ha explicado que los ejecutivos extremeños y central y los ayuntamientos de la región están procediendo a evaluar los "daños" registrados en "esta semana de lluvias copiosas" que también han sufrido otras regiones como Andalucía, Castilla la Mancha, Castilla León, Aragón y Navarra, de cara a la elaboración por parte del Gobierno español de un decreto "en conjunto para que todo el mundo se pueda beneficiar" de ayudas.

Acerca de los posibles "daños" que podrían incluirse dentro de este decreto, ha recalcado que podrían estar relacionados con los seguros, la valoración del cultivo y la producción que se preveía o "a lo mejor exonerarlos del IBI".

Asimismo, ha recordado que esta semana ha mantenido dos reuniones en Madrid con representantes de los ministerios de Agricultura e Interior, organismos que evalúan "los importes de las desgracias que ha podido haber durante estas inundaciones" y que "sacan" el decreto con las posibles ayudas, respectivamente.

Desde el Ministerio de Agricultura, agrega, le han trasladado además que se va a "potenciar de alguna manera" que se "pague lo antes posible" y "a lo largo de este mes" a los agricultores que tengan seguros.

No obstante, ha aseverado que los días 1, 2 y 3 de abril "parecía que esto iba a ser el caos", pero que, una vez "baje" el nivel del agua "seguramente los daños no han sido tantos" y "han sido bastante menores" que "como aparentemente son", según ha podido comprobar visualmente en función de lo que "había" y "lo que hay hoy día".

Confederación hidrográfica del guadiana

Sobre este respecto, el representante del Ejecutivo central en la región ha informado que la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha elaborado un informe "exhaustivo", "prolijo" y "bastante concreto" sobre la crecida del río y las precipitaciones que han tenido lugar estos días, ante lo cual ha apostillado que en marzo ha llovido "tres veces más" de lo habitual en este mes.

Según ha indicado, el 1 de marzo los cinco grandes embalses del Guadiana tenían "hueco" para dar cabida a 1.300 hectómetros cúbicos y el día 20 para 700 y en una reunión entre políticos, agricultores y organizaciones agrarias se decidió no soltar agua, salvo 4 metros por turbina.

Ha añadido que del 20 al 27 de marzo se produjeron lluvias "moderadas", pero que del 27 de marzo al 1 de abril entraron en los pantanos 1.000 hectómetros cúbicos cuando entre marzo, abril y mayo se esperaba una media de 475 metros cúbicos de lluvias "que entrarían dentro de los embalses de un año normal" y éstos tenían capacidad para 700 más.

"Ante eso tenía que ir soltando" y "si las confederaciones no hubiesen regulado el agua que entraba en los pantanos al mismo tiempo que salía, porque entraba mucho más que salía, no sé que hubiese pasado", ha reconocido el delegado, a la vez que ha sumado el gran caudal que traían a su vez los afluentes del Guadiana "multiplicando por mucho" el agua de este río.

De este modo, ha defendido la actuación de la CHG mediante "un arreglo matemático" que "se ha hecho perfectamente" y que desde dicho organismo se ha trabajo de forma "normal" y "no ha habido ninguna negligencia por parte de nadie".

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