La concejala de Compromís en el Ayuntamiento de Valencia Consol Castillo ha explicado que su grupo ha pedido la retirada de la propuesta de ordenanza de prostitución a través de una única enmienda, por entender que es "una ordenanza innecesaria que no solucionará el problema de la convivencia en las calles de Valencia, por contener un lenguaje antiguo, profundamente reaccionario" y, sobre todo, por entender que el consistorio "no tiene competencia para sancionar la prostitución en la vía pública".

La edil ha señalado que la ordenanza usa "un lenguaje antiguo, profundamente reaccionario y recuerda a la 'ley de vagos y maleantes'". Castillo ha criticado el hecho de que en su redacción haya frases como "se prohíbe las conductas que bajo apariencia de prostitución, obstaculicen o impidan el libre tránsito de los ciudadanos por los espacios públicos" y, al respecto, se ha preguntado "quién determinará lo que es bajo apariencia de prostitución".

"Una excusa que abre la puerta a una arbitrariedad muy preocupante por parte de la administración", ha destacado la concejala de Compromís, quien entiende que "no es necesaria una ordenanza de prostitución porque no solucionará el problema de convivencia en la vía pública".

Para Castilló, "la experiencia fallida de las ordenanzas de Madrid y Barcelona lo corrobora". "Las ordenanzas de prostitución sólo hacen más difícil la vida de las mujeres que ejercen la prostitución, sin solucionar el problema de fondo", ha aseverado.

SANCIONES

Consol Castillo ha explicado que la ordenanza "abre la posibilidad de sancionar a las personas que ejercen la prostitución en la vía pública". En esta línea, señala que aunque en la ordenanza se recoge que las personas que ejercen la prostitución no podrán ser sancionadas, también se contempla que "estarán cometiendo una infracción" por "el ofrecimiento de servicios sexuales remunerados en la vía pública", de modo que "un agente de la autoridad podrá denunciarlas por desobediencia si no atienden sus órdenes de abandonar la actividad".

La representante de Compromís ha señalado que el Ayuntamiento "no tiene competencia para sancionar la prostitución en la vía pública, ya que como muy bien dice la jurisprudencia, los ayuntamientos deben basarse en una ley de rango superior para sancionar en su término municipal". "La prostitución no es ilegal en España y no hay ninguna ley que la prohíba", ha apostillado.

Castillo ha concluido que "desde una óptica progresista es imposible apoyar esta ordenanza represora, que no solucionará ninguno de los retos planteados, hará la vida más difícil a las mujeres que ejercen la prostitución porque tendrán que esconderse aún más por negociar el servicio sexual, con más probabilidades de agresiones y abre la puerta a denunciar a las mujeres por desobediencia a la autoridad y, en todo caso, sólo trasladará el problema de un lugar a otro de la ciudad".