El Festival Internacional de Música de Cine de Tenerife (Fimucité), que se celebrará entre los días 5 y 14 de julio con el patrocinio del Cabildo, el Gobierno de Canarias y los ayuntamientos de Santa Cruz y Arona, contará en su séptima edición con la presencia de los compositores Marco Beltrami y David Arnold, cuya trayectoria marcará el contenido del primero de los dos conciertos sinfónicos.

De este modo, el viernes 12 de julio, el Auditorio de Tenerife 'Adán Martín' acogerá, de la mano de la Orquesta Sinfónica de Tenerife (OST) y el 'Tenerife Film Choir', algunas de las mejores partituras de ambos músicos, completando un repertorio que repasará, a modo de homenaje, las mejores canciones de la saga Bond, de la que el propio Arnold ha sido musicalmente responsable en los últimos años.

Para la Gala de Clausura del sábado 13, está previsto también un amplio homenaje a algunas de las creaciones de Dreamworks Animation Studios, cuyas bandas sonoras se sumarán al anunciado reconocimiento concertístico que, durante la velada, se brindará a Vàrese Sarabande, sello discográfico número uno del mundo en edición de bandas sonoras, con motivo de su 35 aniversario.

La presencia en Tenerife de Beltrami y Arnold, relacionados profesionalmente con el director Wes Craven y por renovar musicalmente las aventuras de 007 de los últimos años, se añade a la de Alfonso de Vilallonga, ganador del Goya de este año por su trabajo para 'Blancanieves', de Pablo Berger, y que recientemente confirmó también su participación en el Festival de este año.

Marco Beltrami trabajó, entre otras películas de Craven, para su conocida y exitosa saga 'Scream', aunque dentro del género de terror también le corresponden las músicas de 'Mimic', 'Blade II' o 'Hellboy', todas de Guillermo del Toro.

Técnicas modernas

A él se deben, además, las partituras de cintas tan recientes como 'La Jungla: Un buen día para morir', en las que el autor aúna su formación clásica con modernas técnicas de composición.

Por su parte, David Arnold, admirador acérrimo de James Bond, logró cumplir el sueño de poner sus creaciones al servicio de su héroe cinematográfico, a raíz del éxito cosechado en 'Stargate' e 'Independence Day', tomando en 1997 las riendas de la música de 'El mañana nunca muere', y permaneciendo ligado al personaje hasta 'Quantum of Solace' (2008).