Algunos ya forman parte de su maquinaria, otros simplemente le muestran su apoyo. En total, una veintena de personas, con nombres y apellidos, prestan desde hoy su rostro para explicar en un vídeo de qué va el programa político del llamado Partido X, formación que se presentó en sociedad el pasado mes de enero.

Entre ellos hay ciudadanos anónimos y también voces algo más mediáticas, como las del abogado Juan Moreno Yagüe (Demo4.0, 15MpaRato) o la artista y activista Simona Levi (X.net). "¿Queríais caras? Se cuentan por millones", explican, en alusión a aquellos que les demandaban algo más de nitidez.

"Ahora que Internet lo permite, ha llegado el momento de incorporar a las formas de gobierno la capacidad que tiene la sociedad para mejorar directamente sus leyes e instituciones", se escucha en el vídeo en boca de una chica llamada Carla, estudiante de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.

A pesar de que este paso supone un giro en la comunicación del partido —hasta ahora la referencia eran dos actores—, desde el mismo insisten en que su postura no ha variado un ápice: su iniciativa pivota "alrededor de proyectos, no de personajes", explica a 20minutos.es una de sus integrantes que, siguiendo este esquema, prefiere no ser identificada.

De hecho, uno de los "errores" que achacan al italiano Beppe Grillo y su Movimiento 5 estrellas es el personalismo, en el polo opuesto, consideran, a cómo deberían funcionar en última instancia "los partidos en red", como se denomina el Partido X. Ni líderes, ni focos que los iluminen. De momento.

Hace unos días el programa Democracia y Punto quedó rematado; este miércoles, un equipo de unas 70 personas se encargará de dar difusión en redes sociales al vídeo que lo desgrana. Todos los ministros del Gobierno, explican desde el partido, recibieron la semana pasada sendas cartas con el objetivo de que tuvieran el documento sobre la mesa durante el último Consejo en Moncloa. No hubo respuesta por su parte.

Los cuatro puntos generales del programa —Transparencia en la gestión pública; Wikigobierno y wikilegislaciones; Derecho a voto real y permanente; y Referéndum obligatorio y vinculante— han sido sometidos a las "enmiendas" ciudadanas. Se han recibido "unas 200 aportaciones", de las que, aproximadamente, se han incorporado al texto tres cuartas partes. "No somos neutrales, la democracia no consiste en incluirlo todo", asegura la portavoz.

Entre lo excluido, las listas abiertas puras —las prefieren mixtas— o la democracia líquida. "Ha sido emocionante, la gente ha entendido que esto iba en serio, no es un batiburrillo de opiniones", relatan. El Partido X, que surgió "de una urgencia" —social, política, económica—, lleva definiéndose un par de años y dice tener unos objetivos claros; no son optimistas, se mueven en un escenario de "prisa".

El vídeo está plagado de referencias y guiños a diversos asuntos de actualidad, como los desahucios, los "sobres" y las simulaciones "en diferido", que van acompañados de imágenes intercaladas en las que aparecen, entre otros, el expresidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el presidente Mariano Rajoy o el presidente del Banco Santander, Emilio Botín.

"Si los que gobiernan saben que nadie puede ver sus gastos, enseguida hay despilfarro de dinero público, con inversiones absurdas por encima del valor de mercado, se devuelven favores, hay amiguismos...", dice otra de las protagonistas del vídeo, Raquel, doctora en Química Orgánica, sobre uno de los puntos de base del programa.

Agustín Marín, de 32 años, aparece después. Lo que atrae del Partido X —con el que "simpatizaba desde hacía tiempo"— a este futuro arquitecto es su planteamiento de que "todos podemos hacer esas políticas" de las que hablan, explica a 20minutos.es. Le interesa que "una sociedad cada vez más distribuida pueda hacer un Estado que nos beneficie a todos"; en definitiva, la política participativa, poder tomar parte en las decisiones de un Gobierno.

No es del partido, pero se lo está planteando "seriamente". Se pusieron en contacto con él por su papel activo en la Red desde el 15-M y, principalmente, por su denuncia de los recortes en educación, ya que está ligado a la delegación de estudiantes. Vive en Barcelona. Marín no es partidario de "dar un cheque en blanco" a los políticos y cree que el cambio es posible. "Es mejor decir que no lo hemos conseguido que decir que no lo hemos intentado", explica.

Tampoco es del partido Manolo Díaz Pancho, sevillano de 40 años. Trabaja en unos grandes almacenes. Llegó a este vídeo por mediación "de una amiga", aunque conocía de antes al Partido X, por eso se ofreció voluntario. Destaca las "inquietudes" que le rondan por la cabeza desde hace bastante tiempo, por la situación que vive el país. Cree que esta nueva formación representa "lo fácil que se pueden hacer las cosas" y opina que el cambio es posible, aunque "tardará".

Lo sitúa mucho más allá de las próximas elecciones generales, aunque apunta que la sociedad "está cambiando y la gente se está concienciando". No conoce a ninguna de las personas que aparece en el vídeo junto a él, y eso, dice, le gusta: "Que se conozcan las ideas, no a las personas".  Desearía poder participar más en las decisiones del Ejecutivo y recuerda los pocos referendos convocados hasta hoy en España, "es muy triste".

El Partido X cree que "España es el país más adelantado" para llevar a cabo su programa y que la sociedad civil está muy preparada, por ejemplo por su relación con los movimientos 2.0, "que es sin duda vanguardia a nivel mundial", dice su integrante a 20minutos.es.

En su opinión, existe un consenso en las calles no encauzado —por eso, apostilla sin ambages, son la pieza "que faltaba"— y, aunque desde su formación creen que manifestarse sí ha servido para dejar constancia mutua de lo que estaba pasando, la fórmula, opinan, ha quedado agotada, las protestas "no sirven cuando hay un Gobierno que no tiene ninguna relación con sus ciudadanía".

Sobre las elecciones cada cuatro años, su empeño es cambiar "la lógica", que se deje de delegar en otros y participar más. "Queremos que la referencia sea la sociedad civil, no uno de nosotros, aunque sea difícil de explicar".

Dos de los modelos del Partido X son el Marco civil da Internet de Brasil e Islandia. En el país nórdico, sin embargo, la Constitución ciudadana ha quedado en situación de stand by hasta que se celebren los comicios presidenciales. Preguntados por este freno, desde el partido español admiten que el miedo, la confusión y las dificultades asoman cuando surgen cosas nuevas. "Hay reflujos, como ha pasado también en el 15-M, pero luego vuelve a rebrotar".

En su caso, de momento, todo va más rápido de lo que pensaban: van a empezar en breve a organizar "nodos territoriales", equipos temáticos y encuentros "más presenciales —hasta ahora ha habido un par de reuniones virtuales—.

Terminado el programa, el trabajo continuará sobre "la parte de economía", que recorrerá el mismo camino: borrador, aportaciones, etc. El objetivo de todo esto es pedir que la política incorpore "ya" las "herramientas democráticas" que el Partido X defiende. Que los otros partidos asuman sus propuestas, que el sistema las absorba.

Si no ocurre, se presentarán a las elecciones —están registrados como partido en el Ministerio del Interior desde diciembre— con candidatos reales y listas definidas. Aunque, según explicaron en enero a 20minutos.es, "lo más probable es que los que den la cara no seamos los que hemos lanzado la iniciativa".